El precio de petróleo supera los US$80 en el mercado internacional, lo que es bueno para las finanzas nacionales pero no para el bolsillo de los colombianos que verán traducida el alza en un aumento en el precio de los combustibles. Analistas prevén que el crudo seguirá aumentando

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El barril de petróleo Brent superó ayer el umbral de los 80 dólares, un precio que no se había vuelto a ver desde finales de noviembre de 2014, en un mercado tenso por la incertidumbre en torno a la producción de Irán y de Venezuela.

Desde el miércoles, los precios suben también debido a una fuerte caída de las reservas estadounidenses. La Agencia de Información sobre Energía (EIA) de EU anunció en la víspera que durante la semana que terminó el 11 de mayo, las reservas de crudo en EU cayeron en 1,4 millones de barriles y las de gasolina en 3,8 millones de barriles.

En cuanto a las perspectivas, según un reporte de Bank of América, publicado por la agencia Bloomberg, los precios del petróleo podrían subir a 100 dólares por barril en 2019, un nivel que no se registra desde 2014, a medida que los problemas de oferta en Venezuela e Irán afecten al mercando mundial.

Por su parte, Goldman Sachs pronosticó que el Brent subirá hasta 82,50 dólares en los próximos meses, aunque admitió cierta probabilidad de que los precios superen ese nivel, pero estimó que la cotización volverá a caer en 2019.

Más ingresos

Esta recuperación del petróleo afecta a Colombia porque los precios de los combustibles están atados a los valores internacionales y a la evolución del tipo de cambio.

El ministro de Hacienda, Mauricio Cárdenas, aseguró que esto representa 400.000 millones de pesos al año en ingresos fiscales por cada dólar por encima del precio que se está usando para hacer las proyecciones.

"Nosotros hicimos una proyección de petróleo a 55 dólares por barril este año; el promedio ya va en 65 dólares por barril lo que significará más ingresos fiscales para el próximo Gobierno", dijo el Minhacienda.

Petroleros

El presidente de la Asociación Colombiana del Petróleo (ACP), Francisco Lloreda, explicó que los precios altos se pueden mantener siempre y cuando los factores antes mencionados continúen, aunque precisó que es factible que vuelvan a caer.

"Éste es un mercado en ocasiones impredecible. Es así como hace más de seis meses lo que hemos apreciado es un incremento en los precios del petróleo a nivel internacional, debido a que los inventarios que existían de crudo se han utilizado y al acuerdo de recorte de la producción de los países que hacen parte de la OPEP. Lo anterior da razones para pensar que el crudo se estabilizaría en torno a los 65 dólares por barril; pero cuando se generan estos aumentos y dependiendo de estos factores, es posible que vuelvan a caer", precisó.

El dirigente gremial sostuvo que lo importante para la industria petrolera colombiana más que el precio es la competitividad.

“Por eso hemos insistido en la seguridad jurídica. Ojalá logremos tener un régimen fiscal igual de competitivo a otros países de la región, porque independiente del rango de precios todo el mundo está buscando competir por la inversión", indicó.

Lloreda sostuvo que el alza en los precios del crudo en los mercados internacionales es una gran noticia para el Estado colombiano. Por cada dólar que se incremente el precio del barril en el mercado internacional, y si este dólar se mantiene todo el año, esto le reporta al fisco 350.000 millones de pesos en impuestos.

"En la medida que estos precios se incrementen es mejor para las finanzas del Estado, para las regiones en materia de regalías y es mejor para los colombianos, ya que los recursos que esta industria no le aporta al Estado los tenemos que aportar todos a través de impuestos, como ha venido sucediendo en los últimos años", puntualizó.

Las causas

Desde hace varias semanas, los precios se vieron impulsados por la preocupación respecto a la producción en Venezuela e Irán, tras la decisión de EU de salir del acuerdo sobre el programa nuclear iraní.

"La caída continua de la producción de petróleo en Venezuela está simultáneamente tirando hacia abajo la producción de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPOE)", subrayaron los analistas de Commerzbank.

La industria venezolana se ve fuertemente afectada por la crisis económica y política que sacude al país. Además, las elecciones presidenciales del domingo, en las que Nicolás Maduro es el gran favorito, no tranquilizan a los mercados.

"En el caso hipotético de que EU prohibiera totalmente las importaciones de crudo venezolano, esto conllevaría para el mercado la desaparición de más de 400.000 barriles" diarios, subraya Tamas Varga, analista de PVM.

La OPEP está comprometida desde finales de 2016, y de momento hasta finales de 2018, en un acuerdo de limitación de su producción junto a otros diez productores, incluida Rusia. Su eventual prolongación debe decidirse en una reunión en junio.

Incertidumbre iraní

La incertidumbre sobre la producción en Irán, tras la retirada estadounidense del acuerdo nuclear y la reinstauración de las sanciones por parte del país norteamericano, también contribuyó a la subida de los precios en las últimas semanas. La petrolera francesa Total afirmó que no terminaría un gran proyecto gasístico emprendido en julio de 2017 si no obtiene una derogación por parte de las autoridades estadounidenses.

"Es un revés para la Unión Europea (UE), que desea mantener el acuerdo" con los otros firmantes, comenta Jasper Lawler, analista del London Capital Group.

La empresa china CNPC podría, sin embargo, reemplazar al gigante francés, informó el miércoles el ministro del Petróleo iraní.

Es difícil por lo tanto predecir el futuro de la producción iraní cuando, al mismo tiempo, Arabia Saudita, primer exportador mundial de crudo y gran rival de Irán, declaró recientemente que tomaría todas las medidas necesarias para impedir escasez de aprovisionamiento de petróleo.

Sin embargo, varios expertos subrayaban a mediados de abril que Riad quería ver el barril de petróleo subir hasta los 80 dólares o incluso 100 dólares para aumentar el valor de la petrolera Saudi Aramco antes de su próxima salida a bolsa.