Hay que aumentar las exportaciones para bajar el déficit corriente: Díaz | El Nuevo Siglo
LAS TRANSFERENCIAS corrientes incrementaron 7,6 % frente al mismo registro de 2023. /Foto: Daniel Soriano ENS
Lunes, 24 de Junio de 2024
Redacción Economía

DURANTE EL primer trimestre de 2024 se observó una disminución del déficit de la cuenta corriente (CC) del país; sin embargo, según el análisis de la Asociación Nacional de Instituciones Financieras (ANIF), esta respondió principalmente al menor consumo interno, por lo que no es necesariamente un resultado alentador.

En cuanto al superávit de la balanza comercial de servicios, la entidad asegura que esta consolidación reflejaría el fortalecimiento del sector turístico y de servicios informáticos y técnicos lo que podría ayudar a empezar a corregir el déficit de la CC de forma estructural.

Frente al panorama anterior, EL NUEVO SIGLO habló con Javier Díaz Molina, presidente de Analdex, sobre qué opina sobre el déficit de la cuenta corriente, a lo que el ejecutivo respondió:

“En el primer trimestre del 2023, el déficit de cuenta corriente había sido de -4,2 % y ahora es de -1,9 %, esto por lo que el ritmo de decrecimiento de las exportaciones ha sido más lento que el de las importaciones, las cuales han tenido unas caídas más fuertes”.

Así mismo, añadió que un déficit en la cuenta corriente de la balanza de pagos no es un problema en sí mismo, pues manifestó que lo importante es analizar cómo se financia ese déficit, si es con endeudamiento o con inversión extranjera, “en el caso de Colombia, el déficit se ha financiado con inversión extranjera”.

Frente a qué se puede hacer para reducir esa cifra, Díaz indicó que el objetivo es aumentar las exportaciones del país.

“Insistimos en el hecho de que deberíamos estar por encima de los US $100.000 millones al año, si tomamos el promedio regional per cápita exportado. El Gobierno debe trabajar de la mano del sector privado, para que diversifiquemos destinos, empresas y productos con valor agregado, con el fin de insertarnos con más fuerza en cadenas globales de valor”, manifestó el presidente de Analdex.

Por otro lado, es importante resaltar que desde 2001 el resultado de la CC de Colombia se ha ubicado en terreno negativo, es decir que ha permanecido en déficit. Esto indica que el país consume o adquiere más productos/servicios/ fondos del exterior de los que oferta. En consecuencia, la cuenta de capitales se ha mantenido en superávit.

Para el primer trimestre de 2024, la balanza comercial registró un déficit de -1,9 % del PIB, equivalente a –US $1.924 millones, cifra inferior al -2,8 % del PIB registrado un año atrás. Analizando los componentes, esta corrección estuvo explicada por un menor déficit en la balanza de bienes de -2,0 % del PIB y por un superávit de 0,1 % del PIB en la de servicios.

Rubros de la CC

La CC está compuesta por tres rubros, esto es, que, los cambios en el déficit de las cuentas corrientes pueden responder a cambios en cualquiera de estos.

El primero es la balanza comercial, esta representa el intercambio de bienes y servicios que realiza Colombia con otros países, y ha sido tradicionalmente deficitaria; se explica en buena medida por la oferta interna que es insuficiente para suplir la demanda, lo que lleva al país a tener cierta dependencia de las importaciones. Este comportamiento ha sido evidente en el último año y medio. De esta manera, el déficit de la balanza comercial disminuyó, pasando de -3,5 % del PIB en 2022 a -2,2 % del PIB en 2023.

El segundo rubro es la renta de los factores o ingreso primario. Con un valor de US $3.324 millones, el déficit de la renta de los factores se ubicó en -3,3 % del PIB en el primer trimestre de 2024. Si bien este sigue siendo el componente que más le resta al balance de la CC, si se compara con el resultado de hace un año se observa una corrección de US $542 millones, lo que representó una caída del 14,0 %.

El último componente son las transferencias corrientes, también conocido como ingreso secundario. Entre enero y marzo de 2024 este componente acumuló ingresos netos de US $3.332 millones, equivalentes a 3,3 % del PIB. Dicho superávit estuvo explicado principalmente por un crecimiento de 9,9% anual en las remesas de los trabajadores.