Inflación no cederá en febrero y llegaría a 13,47% anual | El Nuevo Siglo
EL PRECIO de la gasolina vuelve a incidir en el rumbo de la inflación.
AFP
Lunes, 27 de Febrero de 2023
Redacción Economía

Así como en el primer mes del año la inflación siguió con su senda alcista, alcanzó 1,75 % y llegó a una cifra anual de 13,25 %, para febrero este comportamiento no va a cambiar. Por lo menos esto es lo que prevén los analistas financieros.

No en vano la dirección de Investigaciones Económicas de Bancolombia, a cargo de Juan Pablo Espinosa, dice que la entidad estima que las presiones alcistas continuarán en el primer semestre del año, mientras que antes consideraba que el pico de la inflación llegaría al cierre de 2022.

"Esto se debe, en primer lugar, a que la alta lectura del IPC de diciembre y el incremento de 16 % del salario mínimo exacerbarán el funcionamiento de los mecanismos de indexación en una cantidad importante de bienes y de servicios", señala el análisis.

Las mismas presiones del comienzo de año hacen que se presente un incremento de los precios de los bienes importados ante la elevada tasa de cambio y la aceleración del aumento de los precios de la gasolina y arriendos. A esto se suma la reversión de los alivios en impuestos indirectos, como el IVA completo a hotelería, turismo y pasajes aéreos, el impoconsumo a comidas fuera del hogar, entre otros. Todos estos elementos hacen que Bancolombia estime que la inflación anual se mantendrá por encima de 13 % en el primer trimestre de 2023.

Presiones

En este escenario, la presión inflacionaria no se empezaría a moderar hasta el segundo semestre del año. El Banco de la República no tendría otra opción más que continuar incrementando las tasas de interés. "Dados los resultados conocidos, se hace más probable que a finales de mes haya un nuevo incremento de 100 puntos básicos", indica el informe de la entidad financiera.

De otro lado, los analistas consultados por el Banco de la República estiman que la inflación mensual en Colombia para febrero se ubicará en 1,57 %, en promedio. El dato máximo en la encuesta mensual de expectativas económicas fue del 2,10 %, y el menor de 0,78 %.

En cuanto a la cifra anual, los analistas proyectan que la inflación total en diciembre de 2023 será de 8,90 % y sin alimentos de 8,36 %. Para diciembre de 2024, en promedio, llegaría a 4,99 %, según el dato promedio de la encuesta, y sin alimentos a 4,69 %.

Asimismo, la respuesta promedio de los analistas indica que en febrero la tasa de intervención quedará en 12,78 %, en marzo en 13,18 % y el 30 de abril, en 13,22 %. Desde el 30 de junio, los analistas proyectan que empezará a bajar (13,05 %). Para diciembre llegaría a 10,86 %.

De otra parte, José Ignacio López, director ejecutivo de Investigaciones Económicas de Corficolombiana, señala que el aumento mensual en febrero de la inflación sería de 1,83 %, frente a 1,63 % registrado en el mismo mes del año pasado, con lo cual la inflación anual aumentaría a 13,47 %.

Bienes y servicios

Señala López en su análisis que la inflación básica (bienes y servicios sin alimentos ni regulados) retomaría su tendencia al alza hacia un nuevo máximo histórico de 9,13 %, reflejando presiones importantes provenientes de servicios.

Respecto a la inflación de servicios, esta tendría una variación mensual de 1,66 % contra 1 % del año pasado, la tasa más alta para esta categoría desde febrero del 2000. Todo esto en línea con presiones continuas de alimentación fuera del hogar, aumentos históricos en arriendos y fortaleza en los rubros asociados a la educación no regulada. La inflación anual aumentaría a 8,7 %, nuevo máximo histórico.

Con relación al Índice de Precios al Consumidor (IPC), a los regulados, el aumento en febrero de 2,61 %, como resultado de ajustes de dos dígitos en las tarifas de educación básica, y alzas continuas en transporte urbano y combustibles. Con ello, la inflación anual retomaría su tendencia al alza, hacia un nuevo máximo desde 2001 (13,8 %).


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En cuanto a la inflación de alimentos, este rubro se ubicaría en el nivel más bajo desde noviembre (1,50 %, frente a 3,3 % hace un año) como resultado de la moderación en los precios de procesados y, en menor medida, de perecederos. La incertidumbre sobre este pronóstico es elevada por el impacto del cierre de la vía Panamericana sobre la oferta de alimentos. La elevada base estadística permitirá un descenso de la inflación anual, a 24,4 %.

Asimismo, en el IPC bienes se espera un aumento de 1,52 %, levemente inferior a la de febrero del año pasado (1,60 %). Presiones provenientes de vehículos y bienes de aseo y cuidado personal seguirían reflejando el aumento de costos y la depreciación del peso. La temporada escolar se sumará a las presiones. La inflación anual retrocedería a 14,3 %.

Perspectivas

En el informe de tendencias realizado por López y la casa financiera, se tendría un escenario base en que la inflación anual alcanzaría un nuevo máximo desde 1999 en el cierre del primer trimestre de este año, cercano al 14 %.

Luego se mantendrá elevada y relativamente estable durante el segundo trimestre del año, en un contexto de indexación a un nivel elevado de inflación, traspaso de la depreciación a los precios finales y disminución gradual en los precios de los alimentos. Pese a su reducción paulatina, la inflación anual se mantendrá en doble dígito por todo el año, y se presentará un proceso desinflacionario evidente solo hasta el segundo semestre. En noviembre, la entrada del incremento a los precios de los alimentos ultraprocesados y bebidas azucaradas presionará al alza la inflación. De esta forma, la inflación cerraría el año en 10,3 %.

Teniendo en cuenta este comportamiento de la inflación, Corficolombiana tuvo en cuenta las implicaciones de política monetaria. “Esperamos que la Junta del Banco de la República aumente su tasa de interés de intervención entre 0,5 % y 0,75 % en su reunión de marzo, hasta 13,25 %-13,50 %, nivel terminal del ciclo alcista. Esta decisión estará en función de la evolución de la tasa de política monetaria real, el Producto Interno Bruto del primer trimestre, el índice de seguimiento de la economía de enero y los resultados del mercado laboral. La posterior reducción en la inflación básica en el segundo semestre y las señales de desaceleración en la actividad productiva darían espacio a recortes en la segunda parte del año, condicionado a que la Fed también inicie los recortes.

Lo que viene de enero

En enero, el Índice de Precios al Consumidor (IPC) registró una variación mensual de 1,78 %, por encima del consenso de los analistas (1,61 %). Con este resultado, la inflación anual aumentó 13 puntos básicos, desde 13,12 % hasta 13,25 % (nuevo máximo de 23 años), reflejando un fuerte incremento de los precios de servicios y regulados.

En servicios, la variación fue de 1,27 % y anual de 8,04 %, nivel récord. Como aportes más relevantes están la alimentación fuera del hogar y arriendo.

Respecto al rubro de alimentos, los costos aumentaron 2,46 % y anual, 26,18 %, mostrando un primer descenso en año y medio tras alcanzar el máximo histórico en diciembre. Las contribuciones más importantes provinieron de la leche, la carne de res, las papas y la cebolla, aunque se dieron variaciones transversales al interior del grupo de gasto.

En cuando a los bienes, registraron 1,48 % mensual y anual de 14,38 % (descenso frente al máximo histórico por alta base estadística), resultado del aumento en los precios de vehículos y productos de mantenimiento del hogar y aseo personal.

Y, por último, en el rubro de regulados, la inflación mensual fue de 2,64 % y anual de 12,81 %, interrumpiendo la tendencia de reducción iniciada en noviembre y repuntado a un nuevo máximo desde 2003, todo como resultado de fuertes aumentos en las tarifas de transporte urbano y de combustibles.