El estadounidense David Malpass, un fiel del presidente Donald Trump, es el único candidato para presidir el Banco Mundial, anunció la institución en un comunicado este jueves.
Malpass, de 62 años, es el actual subsecretario del Tesoro estadounidense encargado de asuntos internacionales.
El Banco Mundial quiere ratificar el nombramiento de su nuevo presidente antes de las reuniones de primavera del organismo y del Fondo Monetario Internacional (FMI) que se celebrarán a partir del 12 de abril.
Malpass, que se convirtió en una figura controvertida para varias oenegés al criticar el Banco Mundial, no tiene ningún adversario para llegar a la presidencia de la institución.
La presidencia del Banco Mundial, que tiene sede en Washington, se atribuye habitualmente a un estadounidense, según un acuerdo tácito por el que, a cambio, la dirección del FMI se suele confiar a un europeo.
En 2017, Malpass no dudó en criticar con dureza las instituciones internacionales que tachó de derrochadoras, "no muy eficientes" y "a menudo corruptas en sus prácticas crediticias".
El candidato estadounidense mostró su deseo de que el Banco Mundial vuelva a centrarse en su misión principal sacando a los países más desfavorecidos de la pobreza y reduciendo el acceso a los préstamos de los países más desarrollados como China.