Moody’s: hay “sobrecalentamiento” económico en A. Latina" | El Nuevo Siglo
LA FIRMA Moody’s explica que uno de los resultados de la expansión es la alta inflación.
AFP
Viernes, 21 de Julio de 2023
Redacción Economía

EN UN ANÁLISIS sobre el comportamiento de la economía en América Latina, la firma Moody’s dice que la región ha recuperado el nivel de producto perdido durante la pandemia y se encuentra en expansión, corriendo a una velocidad de ‘sobrecalentamiento’. A pesar de las diferentes velocidades de recuperación, las principales economías se encuentran en expansión desde finales de 2021, excepto México que solo lo hizo hasta 2022.

Indica el informe que la economía latinoamericana está operando con una brecha positiva del producto, lo cual explica la inflación virulenta. La persistencia de la brecha positiva hará más difícil que la inflación subyacente converja rápido a su meta, lo cual implica que los bancos centrales tendrán que mantener las condiciones monetarias en terreno restrictivo para enfriar a sus economías con el fin de asegurar la convergencia inflacionaria.

Indica que la pandemia golpeó fuertemente a la región en 2020, con el producto regional contrayéndose 15% para mediados de ese año. El impacto fue diferente para cada país dependiendo mayormente de las condiciones de los sistemas de salud y de la respuesta de políticas de cada país.

El impacto

Entre las siete economías más grandes, excluyendo a Venezuela, Perú recibió el golpe más fuerte en el segundo trimestre de 2020 con su economía contrayéndose 27%. En el mismo periodo México se contrajo 19%, seguido de Argentina y Colombia con caídas de 18%, mientras que Brasil y Chile fueron afectados en menor medida gracias a la pronta respuesta de sus gobiernos con medidas de mitigación; estos dos países solo reportaron contracción económica de 11%.

Asimismo, el proceso de recuperación avanzó a velocidades diferentes, con Brasil, Chile, Colombia y Perú liderando el avance y recuperando el producto perdido hacia inicios de 2021. México no pudo recuperar su producto perdido, sino hasta el tercer trimestre de 2022.

Hacia finales de 2022, las siete economías más grandes estaban ya en expansión y con procesos productivos corriendo por encima del potencial. Es decir, estas economías se encontraban operando en territorio de sobrecalentamiento y desarrollando una brecha positiva del producto. Sostienen los investigadores de la firma que “una economía desarrolla una brecha positiva cuando la producción es sobre-estimulada por un exceso de demanda interna, por lo que la economía avanza a una velocidad superior a la capacidad productiva natural. Al final, la persistencia de la brecha positiva encuentra acomodo en mayor inflación e importaciones”.



Señalan que, dado el inesperado choque generado por la pandemia, las principales monedas latinoamericanas se despreciaron; sin embargo, la competitividad cambiaria ganada junto a la disrupción de las cadenas de suministro global amortiguó el deterioro de las cuentas externas en la región. Por lo cual, la inflación fue la principal válvula de escape para el exceso de demanda, lo cual a su vez explica la agresiva respuesta monetaria de los bancos centrales.

Expansión

“Las estimaciones estadísticas del producto potencial generadas por Moody’s Analytics con el uso del filtro Hodrick-Prescott nos permiten calcular las brechas del producto, las cuales indican que la economía de América Latina entró en terreno expansivo al final de 2021, reportando una brecha positiva de 0,5% del producto potencial. La mayoría de las grandes economías latinoamericanas también entraron en expansión en el último trimestre de 2021, excepto México cuyo retraso se debió a los efectos prolongados de la pandemia”, asegura el análisis.

A pesar de que la economía mexicana no fue la más afectada, su lenta recuperación fue mayormente el resultado de las pobres políticas de mitigación implementadas por el gobierno. La economía mexicana solo entró en expansión hasta el tercer trimestre de 2022, un año después del segundo grupo de líderes como Colombia y Uruguay.

Así, la persistente inflación en América Latina fue impulsada por la sobre-expansión de sus economías presionadas por el exceso de demanda que generó la prolongación de las políticas monetarias expansivas de los bancos centrales latinoamericanos.