Desde febrero de este año, la Fundación Help, dirigida por el abogado y magíster en políticas públicas de la Universidad de los Andes, Diego Escallón Arango, ha venido trabajando en la recuperación de la educación presencial con la campaña “#VolverAClasesEsVital”, en el marco de la defensa de acciones judiciales que permitan el regreso a la presencialidad y liderando diferentes estrategias orientadas a docentes.
En pro de dar continuidad a este proceso, la Fundación Help lanza la campaña “#EducaciónPresencialYa”, con el propósito de que los padres de familia pierdan el temor de enviar a sus hijos a los colegios y escuelas, brindándoles información verídica y confiable en un panorama tan incierto como el actual, y buscando la ayuda de los docentes, puesto que su papel es clave en el retorno a la presencialidad.
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Sin duda, es fundamental regresar a las aulas, debido a que la calidad de la educación se ve comprometida cuando las clases son dictadas virtualmente, lo cual vulnera el derecho de los niños, niñas y jóvenes a educarse con ciertas garantías. Contrario a lo que se pensaba, los colegios no se han convertido en un foco de contagio.
Además, el hecho de no contar con clases presenciales trae consecuencias inmediatas, pero también algunas incidencias a futuro que afectarán de manera considerable la calidad de vida de las futuras generaciones. Según el DANE, la inasistencia escolar creció 13,7 puntos porcentuales (pp) a nivel nacional y 25,5 pp en las zonas rurales, ubicándose en el 30,1% (uno de cada tres estudiantes no asiste al colegio).
Señala la Fundación que hay que reconocer los problemas estructurales en la educación, y que estos deben ser resueltos, pero no pueden convertirse en un condicionante para el retorno a las clases presenciales. Desde la Fundación se está presionando por el regreso a la presencialidad total, porque aún hay un 63,8% de estudiantes que están en alternancia, lo que no es lo mismo que la presencialidad.