Debido a las presiones en las alzas de los productos alimenticios en abril y mayo, los mercados prevén una mayor inflación para este año. Con ello el IPC podría alcanzar el 3,33%, superior en 6 puntos básicos a la proyectada inicialmente.
Señala la última encuesta del Banco de la República que “en general, esperamos que estos indicadores permanezcan cerca de los niveles actuales en los próximos meses, ya que la inflación probablemente se mantenga entre el 3,20% y el 3% durante el resto del año”.
En la consulta, el Emisor indica que los productos alimenticios, que explicaron la mitad de la sorpresa al alza en abril 18, son el principal riesgo de inflación general en el segundo trimestre de este año, ya que este grupo registró cinco cifras mensuales negativas consecutivas entre junio y octubre del año pasado, por lo que la base estadística será bastante exigente en estos meses.
Medidas básicas
Por el contrario, se espera que la inflación ex-alimentos y otras medidas básicas converjan aún más al objetivo del 3%, en línea con la amplia y creciente capacidad de holgura de la economía.
De hecho, la mayoría de las expectativas de inflación ex-alimentos cayeron este mes, con las proyecciones de fin de año y doce meses cayendo seis puntos básicos (a 3.31%) y diez puntos básicos (a 3.14%), respectivamente.
De otro lado, los economistas pronostican una inflación de 0.26% durante mayo de este año, por encima de la estimación de algunos mercados de 0.18%. Con ello la inflación anual disminuiría ligeramente a 3.08% en caso de que ese pronóstico se materialice.
La cifra se explicaría principalmente por una moderación tanto de la vivienda como de los alimentos, que se fortaleció el pasado 18 de abril. Específicamente, los precios semanales de alimentos al por mayor que monitoreamos muestran su dinámica más débil desde el 18 de febrero.
En cuanto a la política monetaria, el consenso del mercado no modificó la trayectoria esperada de la tasa repo, que se mantendría en su nivel actual de 4.25% en los próximos doce meses.
Los riesgos
En la última declaración de política, el Banco de la República afirmó que aún existen riesgos alcistas para la inflación, incluido un aumento en los precios de los alimentos que puede afectar las expectativas de inflación y retrasar la convergencia de la inflación al objetivo del 3%, en línea con lo mencionado anteriormente.
Por lo tanto, el avance mayor a lo esperado de la inflación de alimentos en abril de este año (0,66 frente a la estimación inicial de 0,40%) pone una nota de precaución y disminuye la probabilidad de nuevas reducciones de tasas en los próximos meses, en nuestra opinión.
Otro argumento detrás de las tasas estables es el actual nivel expansivo de la tasa real de repo ex ante, que ahora se ubica en 0.95% considerando las expectativas de doce meses (ver cuadro 1). Recordemos que en su conferencia de prensa más reciente, el Director Gerente del Banco de la República mencionó que la tasa real neutral es cercana al 1.3%.