Hotel Vintage cambia de cara en el norte de Bogotá | El Nuevo Siglo
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Miércoles, 30 de Octubre de 2019
Redacción Economía

Sobre la calle 100, abrió las puertas el Hotel Vintage con un encanto especial, una nueva sede del icónico restaurante El Caracol Azul. Oswaldo Toro, uno de sus socios habló con El Nuevo Siglo, y dijo que “la remodelación estuvo a cargo de los socios del hotel, yo y la Familia Lucena Lozada junto con un equipo de trabajo expertos en diseño y remodelación para después de año y medio de arduo labor entregar este formidable resultado”.

Señala que como es un producto nacional, “la administración es propia bajo el nombre Hotel Vintage SAS, actualmente tenemos un plan de comercialización por 15 años, no es una cadena pero en el futuro podría cambiar”.

Toro destaca que “nuestro servicio es personalizado por lo que tenemos servicio de alojamiento, restaurante y bar del más alto nivel, salones de eventos, comunicaciones con la máxima tecnología, contamos con los mejores aliados para hacer la estadía inolvidable”.

Manifiesta que “nos enfocamos en servir a empresarios locales e internacionales y turistas del mundo entero,  gracias a nuestra ubicación privilegiada en la zona financiera de la calle 100, cerca al Word Trade Center; al Parque de la 93 y a tan solo una cuadra de la cra 15. Somos un bello oasis para todos nuestros clientes”.

El empresario Toro dice que “por otro lado, con el restaurante El Caracol Azul ya llevamos cuatro años desde que abrió la primera sede, en la zona G de Bogotá. Este es un restaurante icónico de Guayaquil, que nació hace 44 años y que hace fusión de comida mediterránea y peruana. Es un lugar que visitan presidentes, y clientes ilustres, al igual que en nuestra primera sede de Bogotá y estamos seguros que también pasará con el la nueva sede, la joya de la corona del Hotel Vintage”.

Al mismo tiempo sostiene que “al remodelar completamente el hotel, se respetaron todos los elementos que hacen parte fundamental de este bello edificio de arquitectura francesa, como su hermosa fachada, sus pisos de mármol de carrara, su inigualable pérgola, su bella carpintería, su vistoso  jardín luminoso y sus baños con forja y mármol”.