El mayor reto para el líder de una empresa es lograr el entusiasmo -que a final de cuenta se resume en productividad-. No todos quieren lo mismo. Las metas de un Millennial no tienen mucho que ver con las expectativas de un baby boomer o uno de la Generación X. Pero todos merecen sentirse escuchados, empoderados e importantes dentro de la institución.
Carlos Hernández, CEO de Cahez Corp, coach profesional en emprendimiento y liderazgo e investigador de antropología social, asegura que existen modelos, desde los cuales es posible trazar líneas transversales que conectan a todas las generaciones dentro de la organización. “La clave es buscar un espacio neutral, donde los juicios que tengan entre ellos se desarmen y, desde una posición serena, se construyan acuerdos claros, con límites definidos”, afirma.
Los líderes están en la necesidad de construir propósitos grupales y personales con sus empleados. “Es necesario que cada participante reconozca los aportes que puede hacer desde su rol y la experiencia que tiene para ellos. A cada integrante hay que enamorarlo, darle una causa y darle valor real a su trabajo”, agregó.
Así mismo, hay que generar mentorías activas, que los líderes expliquen claramente las prácticas que esperan, haciendo énfasis en el sentido de hacerla. También es clave que ve valide la posición del equipo, que se escuchen los aportes y definan los ajustes. Deben establecerse tareas a corto plazo. “Existen múltiples tipos de responsabilidades y entregables para generar una adecuada conexión generacional. Es necesario definir cuáles de ellos son de corto plazo y generar algunos espacios para revisar y retroalimentar al equipo sobre los avances que hayan tenido”, afirma Hernández.
Los ambientes de colaboración mejoran la integración de los equipos y la generación de ideas de innovación creadas por diferentes niveles y/o áreas de la organización. De igual manera, es importante proponer proyectos de intrapreneur, los cuales permiten a los equipos desarrollarse horizontalmente, al brindarles la oportunidad de aportar y aprender de diferentes áreas o niveles de desarrollo que se estén llevando a cabo en la organización.