El próximo viernes 2 de febrero se celebra el Día Mundial de los Humedales, que este año hace énfasis en la relación de estos nodos ecosistémicos con el bienestar humano.
La idea, de acuerdo a la ONU, es poner de relieve la gran interconexión entre los humedales y la vida humana, ya que las personas obtienen sustento, inspiración y resiliencia de estos productivos ecosistemas. Bajo esa óptica, lo que se busca es subrayar la manera en que todos los aspectos del bienestar de la población están ligados a la salud de los humedales, característica que llama a cada habitante a valorarlos y protegerlos.
Un humedal sano proporciona agua y alimentos, conserva la biodiversidad, proporcionando medios de sustento vitales y mecanismos naturales de defensa ante fenómenos meteorológicos extremos, entre ellos el cambio climático. De hecho, su restauración es esencial para superar la crisis por el calentamiento global y alcanzar los Objetivos de Desarrollo Sostenible.
Actualmente hay más de 2.400 Humedales de Importancia Internacional en todo el mundo. Cubren más de 2,5 millones de kilómetros cuadrados, una superficie mayor que la de México.
En Colombia, la extensión de humedales es de 2.589.839 hectáreas, representadas en áreas de cobertura de cuerpos de agua naturales continentales, hidrófitas continentales, lagunas costeras y manglares.
La Estrategia Regional de Conservación y Uso Sostenible de los Humedales Altoandinos fue formulada en el marco de la Convención Ramsar. En Colombia hay más de una decena de nodos ecosistémicos en esta categoría.