EL NUEVO SIGLO: ¿Por qué el Partido Liberal no se ha salido del Gobierno?

JULIÁN PEINADO: Advirtiendo que el Partido es conformado por corporados que pertenecen a diferentes regiones, todavía se conserva una esperanza en el Gobierno en que se puedan alinear los proyectos y esto tiene una condición natural y estatutaria: Es que el Partido, a fin de cuentas, en su reglamento, es de centroizquierda, socialdemócrata.

Lo que advertimos es un Gobierno que siendo de izquierda es un mal Gobierno. Por eso lo que yo he venido poniendo de presente en mi condición de corporado es que, independiente de la ideología, no podemos acompañar a un Gobierno que hace las cosas mal y que efectivamente atenta contra los principios democráticos.

Los hechos dan cuenta de esa situación y es, por ejemplo, la liquidación del presupuesto donde se atenta contra alrededor de unas 100 megaobras estratégicas para el desarrollo de los diferentes departamentos de los territorios que afectan la competitividad del país, pero especialmente de esos territorios.

En ese orden de ideas, he venido proponiendo al partido que haga un alto en el camino y que fije una posición con mayor criterio y es que, como mínimo, en respaldo a las regiones y a las obras más importantes de sus departamentos se declare la independencia.

ENS: Si la mayoría de las voces de la bancada están a favor de pasarse a la franja de independientes u oposición, ¿por qué cree que el expresidente César Gaviria no ha tomado la decisión?

JP: Lo primero que hay que advertir es que Gaviria nunca ha estado alineado con el gobierno Petro; por el contrario, ha tenido bastantes reservas.

El tema es que la estrategia del Gobierno ha sido realmente granear a los congresistas, algunos bajo la esperanza de grandes inversiones en sus territorios que hoy en día no son una realidad porque estamos ante un Gobierno incapaz de ejecutar.

En ese orden de ideas, lo que se ha venido generando es una sensación de desesperanza por parte de los congresistas frente a las acciones del Gobierno.

Yo creería que el Gobierno tiene una ruta ideológica-dogmática muy clara y eso no precisamente significa que vaya a acompañar las regiones, sino más bien la defensa de sus dogmas.

Creo que a medida en la que va pasando el tiempo y se van ajustando los cortes para las próximas elecciones, vendrá desgranándose ese mal esfuerzo que ha hecho el Gobierno de dividirnos y posiblemente vamos a lograr reagruparnos.

Pero para nadie es un secreto que dentro del partido hay una fuerza mal llamada progresista, que yo creo más bien es ‘amiguista’ y conveniente con el Gobierno, y algunos congresistas que todavía tienen una opinión tímida. Yo creo que esto lo que va a permitir es precisamente que nos vamos uniendo en torno a las líneas, ahora sí que plantea Gaviria.

ENS: ¿Es necesario convocar una convención para decidir si el Partido se sale o no de la coalición gobiernista, así otros partidos hayan tomado esa decisión sin acudir a dicha instancia?

JP: Estatutariamente, la convención lo que define es el gobierno interno del Partido para establecer los temas disciplinarios, quién va a ser el jefe del Partido, y no estrictamente para definir la posición del Partido frente al Gobierno.

Yo tengo una interpretación y es que el Partido estatutariamente tiene la posibilidad de entregarle las facultades al jefe del mismo para que asuma las posturas frente al Gobierno.

Quiere decir ello que perfectamente el presidente podría dar una orientación, eso no es opuesto a que se pueda discutir en bancada para lograr un proceso de legitimidad.

Sin embargo, estatutariamente el Partido tiene toda la posibilidad de anunciar y hacer propuestas sobre las posiciones que la ley permite tomar, sea independencia, oposición o Gobierno.

ENS: ¿Cree usted que las voces del liberalismo a favor de quedarse en el Gobierno están siendo blanco de ofrecimientos clientelistas por parte de éste?

JP: Yo no puedo hablar por el relacionamiento que puedan tener los congresistas de mi bancada con el Gobierno. Lo que sí es claro es que hay unas posiciones bastante radicales con el Gobierno, por ejemplo, tenemos una garantía bastante recalcitrante que, inclusive, para los que lideraron la propuesta de la reforma a la salud de la Comisión Séptima.

También, algunas fuerzas que se han visto diezmadas en estas últimas contiendas electorales podría decir uno que está buscando el acompañamiento y el apoyo del Gobierno para fortalecer sus equipos.