“NINGUNA sentencia detendrá la verdad de lo ocurrido el 28 de julio, ni está por encima de la soberanía popular" aseguró en X el candidato presidencial de la oposición venezolana, Edmundo González, tras el fallo del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) que convalidó la reelección de Nicolás Maduro.
Tras asegurar que el TSJ "desde hace mucho tiempo dejó de ser un tribunal imparcial y al servicio de la Justicia para convertirse en el brazo ejecutor" del gobierno, González afirmó que "desde que Nicolás Maduro acudió al que debería ser el máximo tribunal de la nación, sabíamos que no buscaba otra cosa que negar la verdad y seguir escondiendo las actas con una irrita decisión judicial. Dictaron una sentencia para complacer al régimen. Una sentencia que en lugar de abrir un camino a la paz, solo agudizará la crisis que vivimos".
Sin embargo, el exembajador aseguró que "intentar judicializar los resultados de las elecciones no cambia la verdad: ganamos abrumadoramente y tenemos las actas que lo demuestran".
Asimismo, instó a los miembros del Consejo Nacional Electoral (CNE) a que "no se escondan detrás de un tribunal" y que "asuman su papel y respeten los resultados". En este sentido, les ha pedido que muestren las actas mesa por mesa y "den paso a una auditoría internacional, imparcial, independiente y confiable". "Eso es lo único que deben hacer", ha zanjado.
El también opositor Henrique Capriles, excandidato presidencial sostuvo que la sentencia "no resuelve ni cambia lo que el pueblo venezolano decidió en paz con su voto", sino que ahonda la "gravísima situación institucional" en el país sudamericano, marcado por la "desconfianza" ciudadana en las instituciones.
"Seguiremos junto a la gente buscando que prevalezca la verdad y se respete en paz la soberanía popular. La mentira jamás podrá ser una solución para Venezuela", ha proclamado Capriles en redes sociales.
Decisión sabida
Sin sorpresas, El TSJ convalidó la reelección de Nicolás Maduro pese a las denuncias de fraude de la oposición y de la comunidad internacional, al pronunciarse sobre un recurso de amparo que éste había presentado el 28 julio, para ‘refrendar’ su triunfo, el que logró con el 52% de los votos según el Consejo Nacional Electoral.
La presidenta del TSJ y de la Sala Electoral a cargo del caso, Caryslia Rodríguez, leyó la sentencia que "certifica de forma inobjetable el material electoral peritado y convalida" los "resultados de la elección presidencial del 28 de julio del 2024, emitidos por el Consejo Nacional Electoral, donde resultó electo el ciudadano Nicolás Maduro Moros" para "el período constitucional 2025-2031".
La magistrada citó un informe que concluyó que "los boletines emitidos" por el CNE "están respaldados por las actas de escrutinio emitidas por cada una de las máquinas de votación" y "mantienen plena coincidencia con los registros de las bases de datos de los centros nacionales de totalización". El fallo, subrayó, es inapelable.
El TSJ no dio detalles técnicos del peritaje, como por ejemplo el tamaño de la muestra analizada.
Juristas coinciden en que la acción del TSJ era improcedente, al sostener que esa corte asume atribuciones que corresponden al CNE.
El TSJ dijo que el material electoral queda bajo su "resguardo" y exhortó al CNE a publicar en la gaceta oficial los "resultados definitivos", sin pedir detalle mesa por mesa.
La autoridad electoral alega que no ha divulgado el escrutinio debido a un jaqueo que también convalidó la máxima corte. Su sitio web sigue caído, casi un mes después de la elección.
El TSJ declaró en desacato a González por su negativa a acudir a las audiencias del peritaje y anunció que remitirá su sentencia al fiscal general Tarek William Saab de cara a "sanciones".
González argumentó que se ausentó por estar en "absoluta vulnerabilidad por indefensión".
Tras conocerse la decisión de la máxima corte de Venezuela, Maduro dijo que su victoria había sido "histórica y contundente".
"Hoy el Tribunal Supremo de Justicia en su Sala Electoral, luego de hacer un trabajo técnico, científico, profesional y jurídico, basado en las leyes como Poder Judicial de la nación, ha emitido una sentencia histórica y contundente. Y nosotros decimos (...) ¡Santa palabra, hágase la paz!”, expresó ante una multitud en el estado costero de La Guaira.
También, como era de esperarse, el alto mando de la Fuerza Armada ratificó su “lealtad absoluta” a Maduro.
"Ratificamos absoluta lealtad al ciudadano Nicolás Maduro Moros, presidente constitucional de la República Bolivariana de Venezuela, nuestro Comandante en Jefe, reelecto por el Poder Popular, legítimamente proclamado por el Poder Electoral y ahora ratificado por el máximo tribunal de justicia del país, para el próximo periodo presidencial", reza un comunicado firmado por el ministro de Defensa, Vladimir Padrino.
El Ejército, "siempre apegado a la Constitución y leyes", ha indicado que "acata de manera absoluta y categórica la sentencia" emitida, "convalidando los resultados emitidos previamente por el Consejo Nacional Electoral (CNE)". "Una vez más, el Estado venezolano a través de sus legítimas instituciones, garantiza el respeto a la voluntad política del soberano, la preservación de la paz y la estabilidad de la nación".
En este sentido, ha lamentado que todo ello haya "intentado ser alterado por grupos fascistas de extrema derecha que pretendieron concretar un golpe de Estado, para lo cual recurrieron a la violencia y al enfrentamiento entre connacionales, además de actos terroristas, vandálicos y cibernéticos, que fueron debidamente controlados por el esfuerzo de la unión cívico-militar-policial, pero que lamentablemente dejaron un nefasto saldo de varios fallecidos y heridos, así como cuantiosos daños materiales".
Con la ‘certificación’ del TSJ, el régimen seguirá implementando sus proyectos para acallar a sus detractores. El Parlamento, controlado por el chavismo, impulsa por su parte una serie de leyes que incluyen una legislación contra el fascismo -término que Maduro suele usar para descalificar a sus adversarios- y una para regular las redes sociales. La plataforma X está bloqueada. Ya fue votada una ley de fiscalización de oenegés, criticada por activistas.
"Un fascista no puede ser candidato a ningún cargo de elección popular", afirmó el poderoso jefe del legislativo, Jorge Rodríguez, que propuso además una reforma a la ley de partidos políticos. "Si quieren entrar en el juego democrático lo primero que tienen que hacer es acatar esta sentencia".