El presidente de Ecuador, Lenín Moreno, anunció el lunes que desclasificará informes sobre el presunto secuestro en Colombia de un político opositor por parte de agentes de Inteligencia, en medio de una indagación que salpica a un exmandatario.
"Hemos tomado la decisión de desclasificar absolutamente toda la información que tiene la Senain (Secretaría de Inteligencia) con respecto al supuesto secuestro que ha sufrido el señor (Fernando) Balda en la ciudad de Bogotá", dijo el gobernante a la prensa.
Agregó que la medida se enmarca en el respeto a los derechos humanos que "son parte fundamental de una democracia, y nosotros no queremos bajo ninguna circunstancia permanecer ajenos a ellos".
Balda, exdiputado del Partido Sociedad Patriótica (PSP), de oposición al expresidente Rafael Correa (2007-2017), sostiene que cuando estaba en Bogotá en 2012 cinco personas lo subieron a la fuerza a un automóvil, aunque la Policía colombiana interceptó el vehículo y frustró el secuestro.
El político fue expulsado de Colombia el 10 de octubre de 2012 por pedido de Quito, que adujo que el exlegislador estaba condenado a dos años de prisión por injurias contra el gobierno de Correa, pena que debió cumplir en una cárcel ecuatoriana.
Estando en prisión, Balda -quien desde tres años antes estaba refugiado en la capital colombiana- también fue condenado a un año de cárcel por atentar contra la seguridad del Estado, tras denunciar la existencia de un centro de espionaje oficial en Ecuador.
El exdiputado, quien se consideraba un perseguido político de Correa, presentó una demanda ante la justicia ecuatoriana en la que insiste en la participación del exmandatario en su presunto secuestro.
El expresidente, aún sin cargos, declaró por pedido de la Fiscalía por este caso hace dos semanas en Bruselas, negando estar implicado en el hecho.
El pasado jueves, la justicia ordenó prisión preventiva contra el excomandante general de la policía y también exdirector de Inteligencia de la institución, Fausto Tamayo, y el extitular de la Senain Pablo Romero, quienes son investigados por supuestamente haber ordenado el secuestro.
Tamayo cumple actualmente una condena de 13 años de cárcel por corrupción, tras ser involucrado en un caso de cobro de sobornos dentro de la institución policial.
Además tres agentes de Inteligencia de Ecuador están detenidos desde marzo al parecer por participar en el secuestro, de acuerdo con la Fiscalía.