Seis cadáveres encontrados el miércoles en el estado mexicano de Zacatecas corresponden a jóvenes que habían sido secuestrados días atrás en esa región del centro-norte del país, informó este jueves el secretario del gobierno local, Rodrigo Reyes.
"La fiscalía acudió al lugar (...) realizó los peritajes, trabajos forenses, y el día de ayer por la noche los familiares ya pudieron identificar a los jóvenes", dijo el funcionario a la cadena Milenio. Un joven más del grupo de siete fue encontrado el miércoles con vida pero herido.
Las víctimas, de entre 14 y 18 años, habían sido secuestradas en la madrugada del domingo pasado por un grupo armado en una hacienda de la localidad de Villanueva, donde habían asistido a una fiesta. Eran amigos entre sí.
Los cuerpos y el sobreviviente fueron hallados el miércoles en un paraje rural de ese mismo municipio, en medio de los operativos desplegados por fuerzas estatales y federales para rescatarlos.
Este jueves temprano, el presidente Andrés Manuel López Obrador lamentó el hecho y dijo que el joven herido, identificado como Sergio Yobani Acevedo, "está declarando para conocer el por qué de estos crímenes".
Dos hombres mayores de edad permanecen detenidos desde el martes y "hay altas probabilidades de que estén vinculados" con los hechos, según Reyes, quien reiteró que Acevedo se encuentra "estable" pese a tener contusiones en la cabeza y el rostro.
El joven recibe atención en un hospital de la ciudad de Zacatecas, capital del estado.
La muerte de los seis jóvenes se produjo un mes y medio después del secuestro y posible asesinato de otros cinco muchachos, amigos de la infancia, en Lagos de Moreno (estado de Jalisco, oeste), un caso que causó conmoción.
Indagan móviles
La fiscalía no ha informado aún sobre los móviles del caso de Zacatecas, donde operan varios cárteles del narcotráfico que se disputan rutas de trasiego de drogas y el cobro de extorsiones, entre otras actividades ilegales.
De hecho, el organismo descartó inicialmente que se trate de un reclutamiento forzado por parte de grupos criminales, una práctica que suele afectar a hombres jóvenes en varios estados de México donde actúan las bandas del narcotráfico.
"Estaban dormidas estas personas (...) cuando aparentemente alrededor de las cuatro de la mañana empiezan a ver la presencia de un grupo delictivo de personas que llegaron en vehículos y los sacan y se los llevan", había señalado el lunes el fiscal de Zacatecas, Francisco Murillo.
A inicios de agosto pasado, el secuestro y presunto asesinato de cinco jóvenes en Lagos de Moreno conmocionó al país, pues su cautiverio y tortura fueron difundidos en una foto y un video en redes sociales. Ninguno de ellos ha sido localizado.
Otras siete personas, entre ellas miembros de la comunidad LGBT, también desaparecieron el 1 de septiembre en un centro de rehabilitación del estado de Guerrero (sur).
Los hechos de Zacatecas se enmarcan en una ola de violencia que arreció esta semana en varias regiones del país. El miércoles, grupos armados bloquearon varias vías del estado de Nuevo León (fronterizo con Estados Unidos) e incendiaron vehículos, un día después de que al menos siete cuerpos desmembrados aparecieran en distintos puntos de la ciudad de Monterrey (norte), capital estatal y la más industrializada de México.
Asimismo, el pasado fin de semana, en Chiapas (sur), se vio un inédito desfile de miembros del Cártel de Sinaloa, que disputa al Cártel Jalisco Nueva Generación el control de poblaciones fronterizas con Guatemala, lo que generó desabastecimiento y cortes de electricidad.
México suma más de 420.000 muertos y unos 100.000 desaparecidos, la mayoría atribuidos a las organizaciones criminales, desde el lanzamiento de una polémica ofensiva militar antidrogas en diciembre de 2006.