El senador Miguel Uribe denunció la crítica situación financiera de Ecopetrol, resultado de decisiones erradas del gobierno del presidente Gustavo Petro que están afectando gravemente la estabilidad de la empresa y el bienestar de todos los colombianos
“El gobierno de Gustavo Petro está empobreciendo a los colombianos y está acabando con la empresa más importante del país, Ecopetrol. Desde junio de 2022, el precio de la acción de Ecopetrol ha caído un 47%, pero lo más preocupante es que si Ecopetrol se hubiera comportado como sus pares internacionales como Exxon, Chevron, Shell y Petrobras, su acción estaría valorada en 3.061 pesos, es decir, estaría ganando valor”, afirmó el senador Uribe.
El parlamentario indicó que este comportamiento evidencia que el problema no es ni el contexto internacional ni los precios del petróleo, sino el mal manejo del presidente Gustavo Petro sobre Ecopetrol. A pesar de esta realidad, el presidente de Ecopetrol, Ricardo Roa, intenta justificar la pérdida de valor de la empresa en factores externos, como los precios internacionales del petróleo y la tasa de cambio.
Sin embargo, “mientras el presidente de Ecopetrol, Ricardo Roa, investigado por escándalos de corrupción y financiación ilegal en la campaña de Gustavo Petro, intenta justificar la pérdida de valor en los precios internacionales del petróleo y la tasa de cambio, la realidad es otra: todas las grandes petroleras globales han mostrado un desempeño superior, y Ecopetrol se ha convertido en la empresa más rezagada del sector”, subrayó el senador Uribe. Esta falta de autonomía y la injerencia del gobierno en las decisiones estratégicas de la empresa están minando su rendimiento y la confianza de los inversores.
Finalmente, la reciente rebaja del precio objetivo de la acción de Ecopetrol por parte de JP Morgan, uno de los bancos más importantes del mundo, de 8.5 dólares a 7.5 dólares, es un golpe más. “Según el informe, el deterioro en el valor de la acción de Ecopetrol se da por factores como los bloqueos, la inseguridad física y los problemas de orden público que este gobierno ha sido incapaz de controlar, además de la paralización de proyectos estratégicos como Oslo, que habrían impulsado la producción y reducido el impacto ambiental”, añadió el senador Uribe.
Decisiones como no firmar nuevos contratos de exploración y debilitar la independencia de la compañía reflejan un gobierno que ha perdido la visión a largo plazo, afectando no solo a la empresa más importante de Colombia, sino también a los intereses de todos los colombianos.