Un nuevo hallazgo fiscal en contra de Guillermo Grosso, esta vez por irregularidades por $2.029 millones, durante su paso como presidente de la EPS Cafesalud E.P.S., evidenció la Contraloría General.
“También están involucrados en este hecho otros dos expresidentes de esta entidad: Javier Andrés Correa Quinceno y Carlos Andrés Mantilla Galvis”, indicó el ente de control.
Explicó que se trata de las mismas prácticas evidenciadas en Saludcoop, durante el periodo de intervención que estuvo a cargo de Grosso, en calidad de Agente Interventor, y que generó un hallazgo fiscal por $80.631 millones.
Con la entrada de Saludcoop en Liquidación Forzosa, el entonces Agente Interventor de esa EPS pasó a ser el Presidente de Cafesalud y la historia de lo que sucedió en la primera entidad en el tema del manejo de gastos administrativos, prácticamente se repitió en el ejercicio de su nuevo cargo.
“Pareciera que a Cafesalud no solo se le transfirieron los casi 5 millones de afiliados de la Intervenida EPS, ahora en liquidación, sino también las mismas prácticas de gastos que rebasan los límites de ley y la estructura de contratación con sus propias empresas subordinadas y relacionadas”, señaló la Contraloría.
El ente “pudo verificar que la EPS Cafesalud efectuó gastos bajo el concepto de Equipos de Cómputo, Muebles y Enseres con dineros que corresponden a los recursos de la UPC que se encontraban bajo la administración de la EPS”.
Le puede interesar: Besaile, vinculado a caso 'Mermelada Tóxica'.
En la auditoría adelantada a Cafesalud EPS S.A., sobre la vigencia 2015, el equipo de la Contraloría evidenció el uso por parte de esta EPS de recursos provenientes de la Unidad de Pago por Capitación – UPC, para la compra de activos fijos, registrados bajo el concepto de equipos de cómputo, muebles y enseres; configurando un detrimento de los intereses patrimoniales del Sistema General de Seguridad Social en Salud.
Indicó que “por la naturaleza del hallazgo evidenciado, se adelantó por parte de la Contraloría una Indagación Preliminar que pudo verificar los registros presentados por Cafesalud EPS y culminó confirmando el hallazgo en cuantía de $2.029 millones”.
“Fue así como la EPS, con recursos públicos que debían destinarse a la prestación de servicios de salud, adquirió aires acondicionados, monitores, videobeam, puestos de trabajo y divisiones, butacas, hornos microondas, sillas de cafetería, sillas giratorias para personal, mesas auxiliares para impresoras, sillas ejecutivas para la dirección general, escritorios de oficina, ventiladores, archivadores, una planta telefónica, televisores, neveras, un taladro percutor, escáneres e impresoras, todo lo anterior registrado bajo el rubro de “equipos de cómputo y mobiliario”, se indicó en el informe.
El equipo de la Contraloría también “pudo establecer que los gastos efectuados por Cafesalud durante la vigencia 2015, no tienen relación directa con la prestación de los servicios del Sistema General de Seguridad Social en Salud, ya que la finalidad de esas compras no fue nunca mejorar la infraestructura médica, ni asegurar la normal operación y prestación del sistema de salud”.
Agregó que el análisis de la Contraloría no se limitó a establecer si la EPS excedió o no los límites establecidos en la normatividad con relación a los Gastos Administrativos (que no pueden superar el 10% de la UPC en el régimen contributivo y el 8% en el subsidiado), sino también la naturaleza de estos gastos, que tienen que estar directamente relacionados con la prestación del servicio de salud y la mejora de la infraestructura médica.
Junto a Grosso fueron llamados a responder los presidentes de la EPS: Javier Andrés Correa, quien estuvo en este cargo entre el 20 de febrero de 2006 y el 25 de septiembre de 2015; y Carlos Andrés Mantilla Galvis, presidente entre el 28 de septiembre y el 30 de noviembre de 2015.