Mañana o el martes, Medicina Legal entregaría los resultados iniciales de la autopsia al cuerpo del teniente coronel Óscar Dávila, quien fue encontrado sin vida el viernes pasado en su camioneta en Bogotá. El oficial era pieza clave en la investigación por el escándalo del polígrafo y las chuzadas a la exniñera del hijo del exjefe de Gabinete, Laura Sarabia. Los primeros indicios indican que se trataría de un suicidio. 

Las primeras versiones que dieron las autoridades fue que el teniente coronel se movilizaba en un vehículo acompañado de su hombre de seguridad. Se detuvieron en una calle de la localidad de Teusaquillo, entonces Dávila le habría solicitado que fuera a traerle en algún local del sector una botella con agua.  

Según esa versión, cuando regresó el escolta con el encargo se encontró con el cuerpo sin vida del oficial dentro del vehículo. 

El presidente Gustavo Petro se anticipó el día de ayer a señalar que el oficial se suicidó, al tiempo que dio nuevos detalles de lo ocurrido.  

“El teniente coronel de la policía, Óscar Dávila, adscrito a la seguridad de la Presidencia se la República, ha muerto por suicidio”, dijo Petro. 

Sin embargo, el Mandatario dio una versión distinta de cómo habrían ocurrido los hechos de la que inicialmente se conoció. 

“Cerca de su casa mandó a su conductor por una botella de agua, éste dejó su pistola en el asiento y cuando regresó delante de él se suicidó con un disparo en la cien con la pistola que había dejado. No hay más disparos en el lugar”, informó Petro Urrego. 

Sostuvo el jefe de Estado que “no es cierto que el coronel haya sido encontrado muerto ni que haya dos disparos en su cuerpo”. 

Dijo también el primer Mandatario que previamente el coronel Dávila había recibido varias llamadas de la prensa y asistió a la diligencia del CTI en el piso 13 de la DIAN. 

Agregó el presidente que “el coronel Dávila deja dos niños menores de edad. A su familia mis más sentidas condolencias. QEPD. Su labor en Presidencia era asegurar los sitios donde yo tendría que ir en cumplimiento de mis agendas. A eso se dedicaba el personal del piso 13 de la DIAN en donde no había ningún tipo de aparatos de interceptación”. 

Por su lado, el ministro de Defensa, Iván Velázquez, también dijo que hay certeza de que se trató de un suicidio.  

“No existen realmente dudas, fue un suicidio”, dijo el ministro Velásquez.  Agregó que “de eso hay certeza tanto del CTI como de la Sijín en las diligencias que practicaron en la noche de ayer (viernes). Inclusive, no solo las afirmaciones del subintendente que conducía el vehículo, sino también la confirmación que por las cámaras del sector pudieron hacer sobre la veracidad de estas afirmaciones”. 

Supuestas amenazas 

El teniente coronel Óscar Dávila figuraba en la investigación por abuso de poder que adelanta la Fiscalía a varios integrantes de la policía que hacen parte de la seguridad de la Casa de Nariño, porque fue llevada aparentemente contra su voluntad al polígrafo Marelbys Meza, quien era la niñera del hijo de la entonces jefe de Gabinete y mano derecha del presidente Petro, Laura Sarabia, pues investigaban el robo de 4 mil dólares de la casa de la entonces funcionaria. 

También el nombre del teniente coronel Dávila, junto con otros policías, figuraba en otra investigación que abrió la Fiscalía por las interceptaciones ilegales que se ejecutaron supuestamente con equipos de inteligencia que hay en el piso 13 de la Dirección de Impuestos Nacionales (DIAN), donde funciona la Sala de Anticipación, a Meza y otra mujer que prestaba sus servicios como doméstica a Laura Sarabia cuando desaparecieron los 4 mil dólares, que dijo la entonces funcionaria eran viáticos que recibió en los viajes que acompañó al Presidente. 

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El fiscal General, Francisco Barbosa, dijo que dichas interceptaciones fueron ilegales porque los policías para justificarlas, cuando las solicitaron ante un fiscal de Chocó, falsearon los documentos utilizando una investigación contra el Clan del Golfo para decir que las dos mujeres prestaban servicios domésticos a cabecillas de ese grupo armado. 

En medio del escándalo por las ‘chuzadas’ y el polígrafo a la exniñera que trabajó para Laura Sarabia, el teniente coronel Dávila envió una carta, fechada el 2 de junio, a la Fiscalía manifestando su disposición de presentarse para ser escuchado. 

“Solicito se me informe mi vinculación como indiciado, y reitero mi disponibilidad de presentarme en fecha y hora que se señale para ser escuchado en interrogatorio”, indicó el teniente coronel Dávila en la misiva que presentó a la Fiscalía.   

Por su parte ayer, el abogado Miguel Ángel del Río aseguró que el teniente coronel Óscar Dávila lo contactó hace algunos días para pedirle ayuda pues supuestamente era perseguido. 

“Un hombre valiente que quería defender y que me buscó pidiendo ayuda. Su gran temor era la persecución por parte de Fiscalía”, dijo Del Río. 

El abogado aseguró que “la fecha real de la radicación de la solicitud para ser escuchado fue el día 5 de junio. El día 6 se hizo una inspección en el piso 13 frente a la Casa de Nariño atendida por él donde fue amenazado. El día 8 me reuní con él y me dio detalles de la amenaza y la persecución”. 

Agregó Del Río que “el día de ayer (jueves) me reuní con el coronel Dávila, quien me buscó para manifestarme que de la Fiscalía lo estaban amenazando. Le advirtieron que no se detenían ‘hasta que corriera sangre’. Hoy se quitó la vida con su arma de dotación. Lo de la Fiscalía es una persecución infame”. 

De otra parte, ayer, la Procuraduría General de la Nación constituyó una agencia especial para que asuma la representación del Ministerio Público en la investigación penal por la muerte del coronel de la Policía Nacional, Darío Dávila Torres, “presuntamente involucrado en el escándalo de las escuchas ilegales a la exniñera de Laura Sarabia, exjefa de gabinete del presidente de Colombia”, señaló el organismo. 

El coronel Dávila era el jefe de la Sala de Anticipación, unidad que hace parte del esquema de seguridad del presidente Petro, con el fin de prevenir situaciones en que se pueda ver afectada su integridad. 

Por ello esta Sala tiene autorización para interceptar comunicaciones con equipos que fueron donados por otros gobiernos, instalados allí en la administración de Juan Manuel Santos. 

La Fiscalía realizó la semana anterior una inspección a esta Sala ubicada en el piso 13 del edificio de Impuestos Nacionales, a pocos metros de la Casa de Nariño, para verificar si desde allí se hicieron las interceptaciones ilegales a las dos extrabajadoras de Laura Sarabia.