La administración invirtió $7.6 billones para mejorar la atención en salud, educación e integración social
“Me complace compartir con todos los bogotanos que el DANE acaba de informar que redujimos la pobreza multidimensional en Bogotá (…) tenemos 114 mil personas menos en 2018 respecto a 2016, en situación de pobreza multidimensional”, con esas palabras el alcalde Enrique Peñalosa le dio la buena nueva a la ciudad.
Pasar de 6.9% a 4.3% en los indicadores es un gran logro para la ciudadanía, puesto que es el valor más bajo que se ha registrado en la historia. Además, es la mayor reducción entre las regiones del país, dado que, aparte de Bogotá, la zona oriental fueron las únicas que disminuyeron sus números.
Con la migración masiva de venezolanos, los aumentos en las tasas de desempleo a nivel nacional, entre otros aspectos, Bogotá tiene las condiciones para que aumente la pobreza en ciertas zonas apartadas, y con ello, la proliferación de la delincuencia y la inseguridad. Sin embargo, y pese a esos factores, gracias a las obras que se han iniciado y las que se han terminado, se pudo revertir la tendencia del crecimiento de la pobreza.
Por lo menos con la inversión de 7.3 billones de pesos en 2018 en sectores como salud, educación, integración social y atención a niños y adultos mayores, son una muestra más del compromiso de la administración de darles mejores condiciones de vida a personas que no cuentan con los servicios mínimos vitales.
Pero los resultados no se deben solamente a que se han destinado más recursos, sino también a que se han administrado con mayor rigor, entendiendo cómo atacar puntualmente la pobreza: reduciendo el embarazo adolescente, hacer un acompañamiento nutricional a los bebés y niños, y la más importante, proteger a la población anciana, que ha crecido considerablemente en los últimos años, a través de la entrega de subsidios y espacios para su bienestar.
Estas son las acciones principales que lograron estas cifras récord:
- El acceso a servicios públicos domiciliarios y condiciones de la vivienda: 61 barrios legalizados, 29.291 viviendas de interés social en construcción y 2.000 mejoramientos a viviendas.
- 730.069 niños u niñas menos entre 2016 y 2018 en trabajo infantil y 184 atendidos gracias a la Ruta Integral de Atenciones para la primera infancia -RIA.
- Aumento y mejora en el sistema de prevención y atención de la maternidad y la paternidad tempranas. Se disminuyó el número de embarazos en menores de 19 años mientras que en 2014 se registraron 17.164, en 2018 la cifra bajó a 10.949.
- Modernización de la infraestructura física y tecnológica en salud que permite una atención pertinente y de calidad: 31 Centros de Atención Prioritaria en Salud.
- Las obras de infraestructura iniciadas y por iniciar en la ciudad aportan cerca de 495 mil empleos, gracias a una inversión cercana a los 48 billones de pesos.
- Atención integral de la población vulnerable ha sido efectiva, ya que Bogotá es una de las ciudades latinoamericanas que más ha recibido migrantes venezolanos, pese a eso, los números de la pobreza monetaria se mantuvieron estables. Mientras que Pasto Cúcuta y Bucaramanga tuvieron aumentos de 5,2%, 2,7%, 2,5% respectivamente.
Con los ojos puestos en…
Hace unos días se anunció en la prensa una campaña algo extraña: que está buscando 25.000 hogares vulnerables, ¿por qué? Para brindarles servicios y apoyos sociales integrales que aporten a la superación de sus condiciones de vulnerabilidad.
Esta búsqueda tiene como fondo buscar a la gente que en verdad necesita ayuda y no sabe cómo recibirla, ya que debido a sus condiciones de vida ni siquiera les permite acceder a la información sobre cómo obtener los beneficios del Estado.
El objetivo es proporcionar la atención básica: aseguramiento en salud, vigilar que los niños tengan cupos en el sistema educativo y de la misma manera, asegurar que asistan a clases, proporcionar más empleo y hacer un acompañamiento especial por medio de las visitas domiciliarias.
¿Qué es la pobreza multidimensional?
La Pobreza Multidimensional es un indicador que hace una medición de privaciones que tienen los hogares en 5 dimensiones: Trabajo, Salud, Educación, Condiciones de la niñez y Juventud, y Vivienda.