En el sector de San Victorino, en el centro de Bogotá, surgió una problemática que afecta a los comerciantes del sector. Recientemente, han denunciado que se les cobra un arriendo por estar en cierta parte de la calle.
“La situación en San Victorino es alarmante, los comerciantes denuncian arriendos ilegales en plena calle que llegan a costar hasta dos millones de pesos por metro cuadrado, además de una creciente ola de violencia que ya ha dejado ocho personas asesinadas en torno a este negocio ilegal” manifestó la concejal Clara Lucía Sandoval.
Ante esta crisis, los comerciantes claman por una intervención urgente de las autoridades para garantizar una temporada decembrina segura y ordenada.
"Según las denuncias que hemos recibido, el sector está actualmente en manos del crimen y del mal manejo del espacio público, perjudicando tanto a comerciantes formales como informales y poniendo en riesgo la seguridad y la convivencia de todos sus ciudadanos", indicó.
Este hecho se suma a la grave problemática de ocupación indebida del espacio público, inseguridad y movilidad que afecta a esta importante zona comercial de Bogotá. Las cocinas ambulantes y otros puestos informales han tomado calles y andenes, impactando la circulación vial.
Ante el panorama, la concejal lideró la creación de una subcomisión de vigilancia y control en pro de San Victorino. Su objetivo será articular acciones de manera urgente y efectiva para abordar estos problemas de forma integral.
“Es vital crear zonas especiales para el comercio informal, con reglas claras y servicios básicos”, señaló Sandoval, enfatizando la necesidad de un acompañamiento social que apoye a las familias dependientes de estas actividades, para que el orden no signifique exclusión o pobreza.