El Gobernador de Cundinamarca, Jorge Emilio Rey, se pronunció frente al reciente fallo emitido por el Tribunal Administrativo de Cundinamarca que ordena el cierre temporal por seis meses del relleno sanitario Mondoñedo. Según el funcionario, esta decisión no compromete la capacidad de manejo de residuos en el departamento.
A través de su cuenta en X, el Gobernador aclaró que la disposición de residuos sólidos de los 78 municipios de Cundinamarca se realiza en un predio diferente al afectado por la medida judicial.
"El fallo del Tribunal recae sobre el predio Mondoñedo, operado por la empresa Sabrisky Point SA ESP, pero los municipios no disponen sus residuos allí. Actualmente, utilizan el proyecto Nuevo Mondoñedo, que tiene licencia ambiental y cuenta con un operador distinto", expresó Rey, garantizando así la continuidad del servicio de disposición de residuos sin afectar la salubridad pública.
El fallo del Tribunal Administrativo de Cundinamarca (@tacundinamarca) en primera instancia, recae sobre el predio denominado #Mondoñedo que estaba siendo operado por la sociedad Sabrisky Point SA ESP.
— Jorge Emilio Rey Ángel (@JorgeEmilioRey) October 5, 2024
Los municipios del departamento NO disponen sus residuos sólidos en ese… https://t.co/6MkFkwfv0R
Detalles del fallo
El Tribunal Administrativo de Cundinamarca, en respuesta a una solicitud de la Procuraduría General de la Nación, ordenó la suspensión inmediata del ingreso de vehículos con residuos al botadero de Mondoñedo, uno de los más grandes del país. La medida responde a la grave situación ambiental denunciada por la comunidad y el Ministerio Público, la cual señalaba los altos niveles de contaminación del aire, suelo y agua en la zona, causada por el vertimiento descontrolado de basuras.
El fallo también establece que la Autoridad Nacional de Licencias Ambientales (ANLA) deberá implementar el cierre definitivo del relleno en un plazo de seis meses y ejecutar acciones para la restauración ambiental del área afectada. La empresa Sabrisky Point SA ESP, encargada del botadero, tendrá que presentar un plan de manejo de lixiviados, gases contaminantes y restauración del terreno, así como un plan social para las personas que dependen del reciclaje en la zona.