Una delicada situación de orden público se registra en la frontera entre Colombia y Ecuador, debido a las acciones delictivas que vienen realizando las disidencias de las Farc.

El ministro del Interior del Ecuador, César Navas, confirmó el secuestro de dos de sus compatriotas, en hechos ocurridos el pasado 27 de marzo. La acción delictiva fue realizada, al parecer, por el Frente Oliver Sinisterra, comandado por alias “Guacho”, disidente de las Farc.

Este plagio generó varias reacciones por parte de los representantes a la Cámara que dividieron opiniones acerca de las razones que han permitido que se fortalezcan estas disidencias.

El presidente de la corporación, Rodrigo Lara Restrepo, calificó como muy grave la situación, por lo que advirtió que se trata de una consecuencia de tener más de treinta mil hectáreas plagadas de cultivos ilícitos manejados por este grupo subversivo. “La preocupación es grande. Si no le ponemos coto a esto, podemos estar repitiendo errores del pasado y armando de nuevo grupos al margen de la ley en el resto del país”.

Por su parte, Wilson Córdoba, del Centro Democrático, celebró la contundencia y vehemencia con la que el Gobierno ecuatoriano está combatiendo este grupo al margen de la ley. “A ese criminal hay que enfrentarlo como es. A esta disidencia que le está haciendo tanto daño a esta región hay que buscarlo con todo el peso de la ley”, añadió Córdoba.

Así mismo, Víctor Correa, del Polo Democrático, dijo que “si no hay un buen proceso de reincorporación, muchos de los guerrilleros que están ingresando a la vida civil podrían caer de nuevo en estas disidencias por el incumplimiento de lo pactado”.

Igualmente, Óscar Ospina, de la Alianza Verde, advirtió que “estos territorios son las regiones más abandonadas de Colombia y los más marginales del Ecuador, por lo que se necesita colaboración bilateral para combatir la criminalidad organizada que se está tomando estos territorios”, expresó.

En el mismo sentido se pronunció David Barguil, del Partido Conservador, quien resaltó que “aquí no podemos ser complacientes con los grupos al margen de la ley porque es darles alas para que sigan delinquiendo y por supuesto el Gobierno colombiano no puede hacerse el de la vista gorda”.

Por su parte, Samuel Hoyos, del Centro Democrático, dijo que esto es consecuencia de tener un gobierno débil que no ha luchado contra el narcotráfico en esta zona del país. “Es un fenómeno de terrorismo trasnacional, pero su origen está en el narcotráfico de las Farc que ha cruzado fronteras y está causando problemas con nuestros vecinos”.

La representante Olga Lucía Velásquez, del Partido Liberal, calificó como infame que se mantenga la práctica del secuestro, por lo que pidió un trabajo transnacional para combatir este flagelo. “Se tiene que trabajar en equipo de manera bilateral para combatir estos grupos que ponen en riesgo la seguridad en la frontera”.

 Finalmente, la representante Vanessa Mendoza celebró el despliegue militar de ambos gobiernos, con el fin de poner fin a esta situación que ha generado caos en esta zona del pacífico. “La experiencia de Colombia en la lucha contra el terrorismo es importante para combatir esta situación crítica que se está generando en el país vecino del Ecuador”.

Todos los representantes coincidieron en que esta situación es bastante tensa, aunque confían en que la crisis generada por la mencionada organización criminal no deteriore la relación con el país vecino.