Columnistas | El Nuevo Siglo

Nuestra luz interior

 

En Navidad celebramos la fiesta de la luz. De hecho, no es una celebración cristiana, sino que data de muchísimo antes del tiempo de Jesús, y que por aquellos sincretismos -necesarios e inevitables- que se dan en todas las culturas, terminó festejando el nacimiento de Cristo, hermano mayor y maestro.

Lo natural: insustituible

Epígrafe

“Por muy poderosa que se vea el arma de la belleza, desgraciada la mujer que sólo a este recurso debe el triunfo alcanzado sobre un hombre”.

Severo Catilina

 

Lo natural: insustituible

Asseff

 

Bolivia  busca la perdida salida al mar a raíz de la derrota experimentada, conjuntamente con el Perú, ante Chile, a fines del siglo XIX, en la llamada “Guerra del Pacífico”. Se entiende que las negociaciones con Chile están avanzadas y, dentro de las posibilidades, cabe la de una solución satisfactoria para los bolivianos, es decir, desaparezca su condición mediterránea.

Nuestro subdesarrollo político

 

Cuando  en nuestros años javerianos cursábamos Estudios Políticos, con el inolvidable Ignacio Restrepo, todas nuestras discusiones giraban en torno de  si Colombia era no un país desarrollado políticamente. Y siempre concluíamos que, por gracia de nuestra "indiosincracia" tribal, estaríamos  condenados a que mientras nos faltara estatura mental y criterio colectivo, jamás saldríamos  de nuestro atraso nacional.

Tributos desequilibrados
La reforma tributaria que se debatió en el Congreso tiene más de inequitativo que de equilibrar y superar los desfases impositivos que existen en Colombia desde hace 20 años, cuando nació la Dirección de Impuestos y Aduanas Nacionales, DIAN.

Llegó Navidad, le rezamos al Niño Dios para recordar su nacimiento hace más de dos mil años en el portal de Belén. El espíritu de Navidad es un sentimiento de fe y de cultura, los cristianos sentimos alegría al llegar la Navidad y nos disponemos a celebrarla como ha sido la tradición.

Carta al Niño Dios
DE niño te escribí muchas cartas y recuerdo que siempre pedí paz y amor para el mundo, y quizá ahora de adulto comprendo que eso no depende de ti, sino de las acciones de cada una de las personas.
Quisiera muchas para mi país, pero cada vez que listo una de ellas, me doy cuenta de que son imposibles de cumplir porque hay personas que se ven beneficiadas por esos problemas, y que de una u otra manera terminan siendo inevitables, porque el destino lo forjamos con hechos y no con deseos.