La Jurisdicción Especial de Paz le notificó al general la Policía, en retiro, Mauricio Santoyo que aceptaba su sometimiento ante esa corte.
Santoyo, quien fue jefe de seguridad del expresidente Álvaro Uribe (entre 2002 y 2005) fue condenado a 13 años de cárcel en Estados Unidos por nexos con el paramilitarismo y por colaboración con narcotraficantes.
La JEP le conceden a Santoyo 20 días hábiles para "expresar de manera concreta, clara y programada, por escrito, de qué forma pretende contribuir al esclarecimiento de la verdad, la satisfacción de los derechos de las víctimas y las garantías de no repetición.
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El jefe de seguridad fue capturado en abril de 2019 por los delitos de concierto para delinquir agravado y su presunta coautoría en desaparición forzada de la desaparición forzada de Claudia Patricia Monsalve Pulgarín y Ángel José Quintero Mesa, miembros de la Asociación de Familiares de Detenidos y Desaparecidos (Asfaddes).
Santoyo actualmente es investigado por presunto lavado de activos y enriquecimiento ilícito.