Nuevo mapa político impacta puja por Alcaldía de Bogotá en 2023 | El Nuevo Siglo
LAS VOTACIONES de Angélica Lozano, Hollman Morris, Miguel Uribe Turbay y Carlos Fernando Galán sirven para proyectar próxima contienda por Palacio Liévano.
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Miércoles, 16 de Marzo de 2022
Redacción Política

El mapa político que delineó la elección parlamentaria del pasado domingo y la forma en que se está moviendo el ajedrez de la campaña presidencial, no solo por los resultados de las consultas interpartidistas sino por los coletazos que se están produciendo en materia de alianzas y retiros de candidaturas, impactan desde ya el escenario de la campaña por la Alcaldía de Bogotá en octubre de 2023.

La sucesión de Claudia López en el Palacio Liévano no se puede abstraer de la nueva correlación de fuerzas partidistas en la capital del país. Son evidentes los vasos comunicantes entre la contienda parlamentaria, presidencial y la competencia por el segundo cargo de elección popular en el país.

En los comicios del domingo no solo Gustavo Petro y Enrique Peñalosa (ambos exalcaldes capitalinos) eran precandidatos presidenciales, sino que dentro de las listas al Senado había una exalcaldesa como Clara López, en tanto que compitieron otros excandidatos a la Alcaldía como Carlos Fernando Galán, Miguel Uribe Turbay, Juan Carlos Flórez, Hollman Morris y David Luna.

Los resultados fueron disímiles: Petro (alcalde 2011- 2015) no solo ganó de lejos la consulta de la coalición interpartidista del Pacto Histórico, que sumó 5,8 millones de votos, sino que él tuvo 4,4 millones de apoyos. Peñalosa (alcalde 1998-2000 y 2016-2019), por el contrario, tuvo el más bajo desempeño en la coalición de Equipo por Colombia, sumando apenas 231 mil votos a nivel nacional.

En cuanto a los candidatos al Senado, López (alcaldesa en 2011) salió electa en la lista cerrada del Pacto Histórico (que conquistó 16 curules), en tanto Miguel Uribe Turbay (excandidato a la Alcaldía en 2019 sumando 426 mil votos), no solo fue cabeza de lista del Centro Democrático, sino su mayor votación a nivel nacional, con 223 mil votos.

Luna (candidato a la Alcaldía en 2011) encabezaba la lista de Cambio Radical al Senado y fue el más votado (112 mil votos) dentro de una plancha de conquistó 11 escaños.

Por el contrario, Galán (candidato en Bogotá en 2019, sumando más de 1 millón de votos) figuraba en el sexto lugar de la lista cerrada del Nuevo Liberalismo, que apenas sumó 330 mil votos en todo el país. Es decir, que no alcanzó el umbral electoral y quedó sin curules.

Flórez (candidato en 1997 y 2007 en la capital) no logró curul este domingo en la lista de la Centro Esperanza (que sacó 14 senadores), pues apenas alcanzó 29 mil votos. A ello se suma que Morris (candidato a la Alcaldía en 2019, cuando sumó 440 mil votos) tampoco salió electo al Senado, ya que la lista de Fuerza Ciudadana solo tuvo 440 mil votos en todo el país y no alcanzó el umbral electoral. La votación del también exconcejal petrista fue ínfima: 9.500 votos.

Castigo a López   

Para no pocos analistas, hubo un voto castigo a la administración de la Alcaldesa y eso impacta, obviamente, una posible sucesión de su sector político en el cargo.

Prueba de ello sería que la senadora Angélica Lozano, esposa de López, pudo reelegirse pero bajó en votación: de los 105 mil apoyos en 2018 en la lista de Alianza Verde, ahora solo alcanzó 87 mil en la lista de la Centro Esperanza y de estos apenas 51.984 en la ciudad, siendo superada por Humberto de la Calle Lombana, que tuvo 87.918 apoyos en la capital, la mitad de sus 187 mil a nivel nacional.

Aunque muchos pronósticos señalaban que Lozano podría pasar de 150 mil votos debido a la fuerza de la administración distrital, su retroceso en las urnas sería reflejo de la impopularidad y gestión accidentada de López, acusada incluso de participar en política, sobre todo por la pelea abierta con petrismo y uribismo.

“A pesar del apoyo de López a su pareja, Lozano pasó de 105 a 84 mil votos. Por su parte, su Coalición fue la gran perdedora. Es Claudia la que debe reflexionar. El legado de la alcaldesa: arrogancia, clientelismo, corrupción y mal gobierno”, trinó ayer Uribe Turbay al replicar a la Mandataria que fustigó a los candidatos que la criticaron y se ‘quemaron’.

Incluso algunos analistas señalan que los problemas de López también afectaron la votación al Senado de la Centro Esperanza en Bogotá. Esta sumó 518.344 votos, pese a que la Alcaldesa ganó con más de un millón en octubre de 2019. También habría afectado al precandidato presidencial Sergio Fajardo en la consulta interpartidista, ya que este apenas consiguió 201 mil votos en la ciudad.

Visto todo lo anterior, no le será fácil a López proyectar un sucesor. Aun así, se habla de nombres como el del exsecretario de Gobierno y hoy jefe de gabinete, Luis Ernesto Gómez, o el de la reelecta parlamentaria Katherine Mirada, la mayor votación individual a la Cámara en la ciudad, sumando 118 mil de los 396 mil votos de la lista de la Alianza Verde.


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Contraste petrista

El contraste mayor se dio en el petrismo. En 2019 apoyó, a nombre de Colombia Humana, la candidatura a la Alcaldía de Morris, sumando 440 mil votos. Pero este apenas si consiguió 4.947 votos para Senado el domingo pasado en la capital, en la lista de Fuerza Ciudadana (de izquierda).

Por el contrario, el Pacto Histórico tuvo las listas más votadas en la ciudad, tanto a Senado como Cámara, con 692.265 en la primera y 816.070 en la segunda, en donde se convirtió en la bancada mayoritaria con 7 de los 18 escaños de la circunscripción.

Debido a que las listas de la coalición petrista al Senado y la Cámara en Bogotá, así como la votación misma de Petro en la consulta en la ciudad (887.567 apoyos), marcaron récord, es claro que esta será una fuerza clave para la competencia por la Alcaldía en 2023.

Por ahora, no se sabe quién podría ser el aspirante a la Alcaldía por el petrismo el próximo año. “… Es muy temprano para eso, además una cosa sería con Petro en la Casa de Nariño y otra si no la gana… Si lo primero pasa, hay que ver que muchos de los nombres fuertes del petrismo van ahora al Senado y por fuera tocaría buscar un perfil que no se me ocurre ahora… Y habría que ver cómo sería la coalición de gobierno nacional y cómo impactaría las elecciones regionales y locales de 2023… Pero si Petro no gana en mayo o junio, no descartaría que buscara un segundo mandato en el Palacio Liévano”, precisó una alta fuente del Pacto Histórico.

Otras toldas

Obviamente, la baja votación del Nuevo Liberalismo es un golpe directo a las aspiraciones de Carlos Fernando Galán para repetir candidatura a la Alcaldía el próximo año. La lista al Senado, en que era el sexto renglón, sumó apenas 150 mil votos el domingo en Bogotá, un rubro muy lejano de los 1.022.874 apoyos que el aspirante logró en octubre de 2019, perdiendo cerradamente con López, que ganó con 1.109.362 votos.

Si bien es cierto que la lista para la Cámara por Bogotá del Nuevo Liberalismo sumó 189.973 votos, solo le alcanzó para conquistar una curul, con Julia Miranda.

Dado el antecedente de Galán en 2019, se esperaba que ambas listas fuera de las más votadas, lo que no ocurrió.

Otra pregunta clave: ¿Volverá Peñalosa a postularse en 2023? No se sabe, pero apenas logró 104.287 sufragios en Bogotá en la votación de la consulta. Muy bajo.

En lo que hace al uribismo, al Senado sumó en la ciudad 336.748 votos y a la Cámara apenas 293.044 (solo conquistó dos curules, pese a que tenía cinco). Son rubros muy lejanos de los 426 mil votos de Uribe Turbay en 2019 (cuando fue apoyado por el Centro Democrático) y de la votación del partido en 2018 tanto para Congreso como Presidencia.

Meses atrás se hablaba de una posible aspiración a la Alcaldía de parlamentarios como Edward Rodríguez o algunos senadores, pero el primero se ‘quemó’ el domingo en su candidatura al Senado y de los otros congresistas no se sabe nada.

Si bien es cierto que partidos como el Conservador, Liberal y Cambio Radical tuvieron una baja representación en la Cámara y sus votaciones al Senado no fueron muy altas, tienen perfiles políticos experimentados que se podrían poner sobre el tapete, aunque todavía es muy temprano.

Sin embargo, como se dijo, todo dependerá de cómo se termine definiendo la contienda por la Casa de Nariño y si el gobierno será de centroizquierda o centroderecha, en un país en donde Bogotá, por lo general, suele terminar en manos de una tendencia política distinta o no alineada con el Gobierno nacional.