LA SENTENCIA de la Corte Internacional de Justicia (CIJ) frente a la última demanda de Nicaragua a Colombia es motivo de celebración nacional, afirmó Elizabeth Taylor Jay, viceministra de Asuntos Multilaterales y miembro del equipo de defensa ante ese tribunal en La Haya, en conversación con EL NUEVO SIGLO.

Aseguró que la decisión abre oportunidades para impulsar el desarrollo sostenible de la Reserva de Biósfera Seaflower. Además, destacó que la soberanía de la isla jamás estuvo en riesgo. “Tal es así que el fallo del 2012 la reconfirmó”, manifestó.

EL NUEVO SIGLO: ¿Cómo interpreta el fallo de este jueves de la Corte Internacional de Justicia sobre la última demanda de Nicaragua a Colombia?

ELIZABETH TAYLOR JAY: Es una victoria clara y contundente que le pone final a una larga saga de litigios entre Nicaragua y Colombia. Hoy es un día de celebración para nuestra nación, sin duda la victoria judicial más importante a nivel internacional para el país en las últimas décadas.

ENS: ¿Qué significa para San Andrés y Providencia el cierre definitivo de los pleitos de Nicaragua contra Colombia?

ETJ: Yo lo veo como una especie de liberación para la comunidad de las islas y una nueva apertura frente a un sinnúmero de oportunidades para, ahora sí, poner en práctica el modelo de desarrollo sostenible de la Reserva de Biósfera Seaflower, que con tanto optimismo se visionó hace más de dos décadas.

Al cerrarse la puerta de la disputa jurídica, lo importante ahora es garantizar el bienestar de los habitantes y el pleno ejercicio de sus derechos. Hay temas que afectan a nuestra comunidad raizal, como el poder desarrollar su actividad de pesca artesanal tradicional, la conservación del medio ambiente –activo principal para el desarrollo social, cultural y económico de la población– o la lucha contra la criminalidad transnacional que permita recuperar la herencia histórica de paz del territorio.

También la posibilidad de contar con mejor calidad de educación para los niños, niñas y adolescentes, el reencuentro con la gran familia Caribe a partir de la superación de las barreras que estos litigios crearon, entre muchas otras aspiraciones de la comunidad.

ENS: ¿Cree que en algún momento, después de tantas décadas de pleitos, los sanandresanos pensaron en el riesgo real de pasar a jurisdicción nicaragüense?

ETJ: No desconozco que en el imaginario de algunos habitantes del archipiélago estuviera esta posibilidad, debido a la cantidad y complejidad de la información relacionada con las disputas; sin embargo, la realidad es que la soberanía de las islas nunca estuvo en riesgo, tan es así que el fallo del 2012 la reconfirmó.

Libertad de pesca

ENS: ¿Hoy los pescadores de la isla pueden faenar con libertad en las aguas que la CIJ dio a Nicaragua, pero cuyo fallo no se ha consolidado porque no existe un nuevo tratado binacional?

ETJ: El tema de la pesca es uno que preocupa mucho a las comunidades, de primera mano lo sé y con seguridad será uno de los aspectos que este gobierno atenderá con la mayor prioridad. Los pescadores son verdaderos especialistas en el mar y los recursos del archipiélago, por lo tanto, serán los primeros llamados a construir colectivamente los acuerdos necesarios para que puedan ejercer cabalmente sus actividades de pesca tradicionales.

Teniendo en cuenta que muchos de los recursos pesqueros y de la biodiversidad tienen dinámicas migratorias que superan las fronteras de los países, será necesario adelantar ejercicios dialógicos con los países de la región para buscar estrategias de manejo coordinado que permitan la sostenibilidad en el largo plazo de estos recursos.

ENS: Todos los gobiernos colombianos han prometido ayudas al archipiélago cada vez que asomaba una decisión de La Haya. ¿Qué tanto se han cumplido todas esas promesas?

ETJ: Bueno, no podemos hablar de anteriores gobiernos, pero lo que sí es claro es que yo encarno una de esas promesas. Por primera vez Colombia tiene una agente, viceministra raizal, voz de la comunidad y una persona que entiende perfectamente sus necesidades.

El presidente tiene una visión clara hacia el Caribe y por eso impulsaremos una estrategia de integración, ya hay unos hitos importantes como el nombramiento de dos raizales en embajadas en la región, pero la estrategia no se queda ahí, busca reconectar las islas culturalmente, reactivar el comercio en ambas vías, cooperar para atender desafíos como el cambio climático, la protección ambiental y la lucha contra el crimen trasnacional entre otros.

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ENS: ¿Existe el riesgo de que el archipiélago pierda prioridad para el Gobierno central debido a que ya no hay peligro de perder allí la soberanía?

ETJ: En realidad no creo que esa sea una posibilidad, especialmente en este, el gobierno del cambio. El presidente Petro, en menos de un año, ha visitado las islas en tres ocasiones, también los jefes de cartera han desarrollado mesas de trabajo para atender asuntos sectoriales y buscar soluciones a problemas de vieja data en el archipiélago, muchos de los cuales no se resuelven de la noche a la mañana. Pero insisto, hay una voluntad sincera de este gobierno de trabajar de la mano de la comunidad para superar los obstáculos que hoy impiden la reivindicación histórica de la comunidad, especialmente la raizal, y el desarrollo sostenible de su territorio.

Valoración

ENS: ¿Cree que los colombianos del interior valoran en su justa dimensión el archipiélago?

 ETJ: Creo que este fallo, más allá de su importancia en lo jurídico, debe recordarnos a todos los colombianos sobre la importancia de nuestros mares, de las comunidades que lo habitan y del respeto hacia las diferencias en el país reconocidas plenamente en nuestra Constitución Política. Es una oportunidad para que nos unamos como nación alrededor de las necesidades de una comunidad que en el pasado se ha sentido desatendida.

ENS: ¿Cómo entender que los raizales todavía no tengan hoy activa la curul étnica en la Cámara de Representantes?

ETJ: Una de las grandes banderas de este gobierno es precisamente la lucha contra la desigualdad en diferentes niveles, incluyendo en participación política. No es una tarea fácil cambiar los sistemas tradicionales de poder en el país. Sin embargo, hasta lo que va de su gobierno, el presidente ha mostrado su voluntad fehaciente de ir cambiando en lo que ha sido posible el liderazgo institucional a diferentes niveles, así hoy en embajadas y ministerios vemos la verdadera diversidad del país.

Otros cambios que requieren de voluntad y decisiones del Legislativo seguramente tomarán más tiempo, esto, mientras se supera la resistencia de compartir el poder con los grupos históricamente marginados, pero hoy más que nunca tenemos una oportunidad con el gobierno del cambio.  

ENS: ¿Cuáles cree que son hoy las mayores preocupaciones y urgencias de la población sanandresana?

ETJ: Sin duda alguna una de las mayores preocupaciones de la comunidad en las islas en el caso del raizal es la pérdida de su cultura, la cual se ha visto en los últimos años cada vez más fragmentada; el acceso a los recursos pesqueros por parte de los pescadores artesanales.

También preocupa a la población el no  poder contar con una economía sostenible, frente a la volatilidad del modelo actual, que le permita no sólo contar con su canasta familiar básica, sino también vivir un nivel de vida apropiado y con dignidad; contar con salud de calidad, hoy muchos de los habitantes tienen que salir de las islas para contar con servicios especializados, en la mayoría de ocasiones personas mayores, dejan su entorno natural para acceder a estos servicios en el continente colombiano y llegar a lugares totalmente desconocidos para ellos.

En materia de saneamiento básico no se cuenta con un sistema de alcantarillado ni de calidad ni en cobertura; el riesgo ante fenómenos climáticos es cada vez más alto debido a la crisis climática; hay pérdida de vidas de la juventud o su encarcelamiento por el flagelo del narcotráfico y falta de oportunidades para acceder a la educación superior. Son muchas preocupaciones, cuyas soluciones implican inversiones significativas de recursos. El gobierno del cambio seguirá trabajando para transformar la realidad de las islas y dignificar este territorio y su gente como se merece.