Las autoridades panameñas continúan fortaleciendo las medidas en la frontera con Colombia para disminuir el ingreso de migrantes ilegales. El ministro de Seguridad Pública confirmó que ya cerraron algunos pasos irregulares con el fin de preservar la seguridad en la zona limítrofe con el Tapón del Darién, en donde operan bandas criminales. Frente a las críticas a las barreras alambradas que se han instalado y cómo estas pueden afectar a los migrantes, respondió que "lo que hemos tratado de establecer, precisamente para el respeto de los derechos humanos y garantizar su vida, fue la creación de un paso humanitario que conduce a los viajeros hasta la zona de Lajas Blancas, "donde son atendidos por organismos como Cruz Roja Internacional, Cruz Roja Nacional, Unicef, Acnur y otros". Allí, los migrantes abordan los autobuses que los conducen hasta Costa Rica para continuar su travesía hacia la frontera sur de Estados Unidos.