Los equipos que habrían sido utilizados por personal del desaparecido DAS para perpetrar las interceptaciones ilegales a magistrados, dirigentes políticos y periodistas están, en su mayoría, en manos de la Fiscalía, que habría incautado las plataformas tecnológicas que se utilizaban para tal fin. “Esos equipos, en su mayoría, los requisó la Fiscalía, cuando se tomó las instalaciones del DAS… Las otras salas de interceptación también están bajo su control”, precisó un alto ex funcionario del desaparecido organismo de seguridad, a propósito de un debate al respecto esta semana en el Congreso.
¿Humo blanco?
La próxima semana el Consejo de Estado emitirá el esperado fallo sobre el proceso para la adjudicación del tercer canal privado de televisión. La ponencia que analizará la sala plena del máximo tribunal de lo contencioso-administrativo sostiene que es imposible adelantar el proceso de subasta mientras haya un solo proponente, lo que implicaría que todo el proceso se caería y obligaría a arrancar de cero. No obstante sólo hasta que salga humo blanco se podrá definir con claridad cuál será el futuro del tercer canal, luego de que sólo el consorcio encabezado por el grupo Planeta (El Tiempo) quedará en carrera. En los corrillos judiciales las apuestas están a favor de que habrá necesidad de iniciar un nuevo proceso licitatorio.
¿Dos canales?
Sin embargo, en altas fuentes gubernamentales se rumora que el Gobierno es partidario de que si se comienza un nuevo proceso de adjudicación, ya no sería uno sino dos los canales que entrarían en juego, puesto que se considera que hay suficiente mercado publicitario para ello. Obviamente todo lo referente a la reglamentación quedaría en manos no de la actual -y para muchos agónica- Comisión Nacional de Televisión, sino del ente o los entes que terminen asumiendo sus funciones. Como se sabe, ya fue aprobado un acto legislativo que le quitó a la Comisión el estatus constitucional y ahora se está pendiente de cómo serán repartidas las funciones reguladoras de la televisión.
¿Y el TLC?
Al tiempo que algunos sectores celebraban la decisión de la plenaria del Senado de hundir el proyecto sobre derechos de autor en Internet, que había sido presentado por el ministro del Interior, Germán Vargas Lleras, otros dirigentes indicaron que parecería que en el Congreso no estuvieran enterados de que uno de los puntos clave de la implementación normativa interna del TLC con Estados Unidos, es precisamente el referido a las reglas internas que garanticen el respeto por la propiedad intelectual, incluyendo obviamente de los contenidos en la red. El Gobierno había considerado que con la reforma que tramitaba sobre Internet se podría avanzar en el cumplimiento de los acuerdos que implica el TLC.
Dudas congresionales
Como era apenas obvio, el hecho de que el senador Roy Barreras, que actuaba como coordinador-ponente del proyecto, celebrara el hundimiento de la iniciativa, después de insistir en varias críticas a fondo, dio pie a que en algunos corrillos del Congreso se rumorara que había aquí una movida del uribismo más radical en La U para dar al traste con un proyecto clave del Ejecutivo. No hay que olvidar que en las últimas semanas se han escuchado versiones en torno de que el ex presidente Uribe estaba impulsando que la bancada de La U se le ‘rebelara’ al Gobierno en varios puntos clave de la agenda legislativa.