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Sábado, 8 de Septiembre de 2018
Redacción Política

De inútiles a injustas

En medio de la discusión del proyecto de ley sobre depuración normativa, que defendió en la plenaria del Senado el congresista Eduardo Enríquez Maya (conservador), el también congresista nariñense José Aulo Polo (Alianza Verde) le pidió una interpelación para decir que estaba de acuerdo con la eliminación de miles de leyes y otras normas que ya no tienen utilidad alguna. Pero el congresista verde indicó que no solo se debería acabar con esa gran cantidad de leyes inútiles e inocuas, sino también con las leyes “injustas”, como las que tienen que ver con el impuesto del IVA.

 

Pulso nariñense

 

Sin embargo, el mismo congresista Polo trajo a colación que la Ley de Fronteras, sobre la cual indicó que poco beneficio le había traído a su región, sería interesante introducirla en el paquete de normas a derogar por “inútiles”. Su colega Enríquez dijo que no estaba de acuerdo con acabar con esa norma pero que sería analizada por los ponentes. Otra parlamentaria nariñense, en este caso la senadora Myriam Paredes, terció también en el debate, indicando que no se podía derogar la Ley de Fronteras (191 de 1995) por vía de este proyecto de depuración normativa, ya que la citada ley permitía, por ejemplo, precios especiales de los combustibles en las zonas limítrofes. Le pidió al senador Polo esperar al debate del proyecto que reforma a la Ley de Fronteras que ya presentó el conservatismo.

 

Disparando normas…

 

Enríquez Maya, en la defensa del proyecto, dio datos muy impactantes. Por ejemplo, dijo que cada cinco días en Colombia hay una nueva ley. Pero indicó que esa no era una costumbre solo del orden central, sino también a nivel regional y local. Según el parlamentario, si en un municipio hay problema chiquito “le disparan” un acuerdo desde el Concejo. Si se trata de un departamento en donde el problema es más “grandecito”, entonces le “disparan” una ordenanza desde la asamblea departamental. Pero si se trata de un problema mayor, entonces le toca al Congreso “disparar” una ley. Enríquez trajo a colación que en materia penal esa sobreproducción normativa era muy evidente, a tal punto que en la actualidad había 14 iniciativas en el Congreso en la materia, que deben ser llevadas a concepto previo del Consejo de Política Criminal.

 

Coincidencias gubernamentales

 

En medio del continuo contrapunteo entre los defensores del anterior gobierno y el nuevo, llamó la atención que la hoy ministra de Justicia, Gloria María Borrero, indicara que había trabajado el tema de la depuración normativa desde cuando era directora de la Corporación Excelencia por la Justicia y que si la administración Santos no hubiera presentado al Congreso este proyecto, entonces ella la habría impulsado. Paradójicamente también intervino el senador Jorge Eduardo Londoño, de la Alianza Verde, quien fuera ministro de Justicia en el segundo mandato de Santos y bajo cuya gestión se le dio un impulso definitivo a este esfuerzo para derogar más de 11.000 normativas consideradas inútiles, desuetas o que ya cumplieron su respectivo objetivo.

 

‘Madurez’ uribista

 

Para terminar con este tema, un senador liberal, en charla informal con un periodista de EL NUEVO SIGLO, indicó que un “síntoma de la madurez” del Senado era que pese a la polarización política alrededor del acuerdo de paz, “ninguno de los congresistas uribistas” pidió que se agregaran al proyecto de depuración normativa algunas leyes y actos legislativos derivados de la implementación del pacto con esa guerrilla, hoy desmovilizada. Medio en serio y medio en broma, el parlamentario indicó que si “por él fuera” derogaría todas las leyes de honores y de cumpleaños de municipios. “…Revise el inventario de leyes de cada año y encontrará que es un completo onomástico legislativo”, precisó.