Un equipo de astrónomos ha reunido y reprocesado observaciones del exoplaneta WASP-121 b, también conocido como Tylos, recopiladas con el Telescopio Espacial Hubble en los años 2016, 2018 y 2019.
Esto les proporcionó un conjunto de datos único que les permitió no solo analizar la atmósfera de WASP 121 b, sino también comparar el estado de la atmósfera del exoplaneta a lo largo de varios años. Encontraron evidencia clara de que las observaciones de WASP-121 b variaban en el tiempo.
Luego, el equipo utilizó sofisticadas técnicas de modelado para demostrar que estas variaciones temporales podrían explicarse por patrones climáticos en la atmósfera del exoplaneta.
WASP-121 b es un Júpiter caliente bien estudiado que orbita una estrella que se encuentra a unos 880 años luz de la Tierra, completando una órbita completa en un período muy rápido de 30 horas. Su proximidad extremadamente cercana a su estrella anfitriona significa que está bloqueada por las mareas y que el hemisferio que mira a la estrella es muy caliente, con temperaturas que superan los 3000 Kelvin.
El equipo combinó cuatro conjuntos de observaciones de archivo de WASP-121 b, todas realizadas con la Cámara de Campo Amplio 3 (WFC 3) del Hubble. El conjunto de datos completo incluido incluyó observaciones de: WASP-121 b en tránsito frente a su estrella (tomada en junio de 2016); WASP-121 b transitando detrás de su estrella, también conocido como eclipse secundario (tomado en noviembre de 2016); y dos curvas de fase de WASP-121 b (tomada en marzo de 2018 y febrero de 2019 respectivamente).
El equipo tomó la singular medida de procesar cada conjunto de datos de la misma manera, incluso si ya había sido procesado previamente por un equipo diferente.
Uno de los investigadores principales del equipo, Quentin Changeat, investigador de la ESA en el Instituto Científico del Telescopio Espacial, explica en un comunicado: "Nuestro conjunto de datos representa una cantidad significativa de tiempo de observación para un solo planeta y actualmente es el único conjunto consistente de observaciones repetidas. La información que extrajimos de esas observaciones se utilizó para caracterizar (inferir la química, la temperatura y las nubes) de la atmósfera de WASP-121 b en diferentes momentos. Esto nos proporcionó una imagen exquisita del planeta, cambiando en el tiempo".
Después de limpiar cada conjunto de datos, el equipo encontró evidencia clara de que las observaciones de WASP-121 b variaban en el tiempo. Si bien los efectos instrumentales podrían persistir, los datos mostraron un cambio aparente en el punto caliente del exoplaneta y diferencias en la firma espectral (que indica la composición química de la atmósfera del exoplaneta) indicativas de una atmósfera cambiante.
A continuación, el equipo utilizó modelos computacionales muy sofisticados para intentar comprender el comportamiento observado de la atmósfera del exoplaneta. Los modelos indicaron que sus resultados podrían explicarse por patrones climáticos cuasi periódicos, específicamente ciclones masivos que se crean y destruyen repetidamente como resultado de la enorme diferencia de temperatura entre el lado oscuro y el lado estrellado del exoplaneta. Este resultado representa un importante paso adelante en la observación potencial de patrones climáticos en exoplanetas.