Un juez de garantías cobijo con medida de aseguramiento en centro carcelario a Pilar Alexon Contreras Erazo, subdirectora de contratación de la Secretaría de Salud de Bogotá, en su momento, y su esposo, Carlos Arturo Flores Carreño, por posibles hechos de corrupción.
Una fiscal de la Seccional Cali con apoyo de la Dirección Especializada contra la Corrupción imputó cargos a la pareja de los delitos de concierto para delinquir, interés indebido en la celebración de contratos y concusión.
Según lo establecido por los investigadores y peritos del CTI, Contreras Erazo, siendo asesora jurídica de la Central Administrativa y Contable del Ejército Nacional (Cenac) Puente Aranda, supuestamente direccionó cinco contratos por valor de $3.000 millones.
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La pareja habría establecido una empresa criminal entre septiembre y diciembre de 2017, que contactaba oferentes para entregar información privilegiada y reservada, brindar asesorías de manera ilícita, garantizar la adjudicación de contratos y, de ser necesario, gestionar prórrogas para el cumplimiento de los mismos. Todo, al parecer a cambio de millonarias dádivas.