Falsificación de registros comerciales, el cargo contra Trump | El Nuevo Siglo
Foto AFP
Martes, 4 de Abril de 2023
Redacción internacional

“No culpable” se declaró el expresidente y precandidato presidencial republicano, Donald Trump, del cargo de falsificación de registros comerciales que el fiscal Alvin L. Bragg le imputó por pagos realizados a través de la Organización Trump en Nueva York.

Casi dos horas duró la diligencia judicial del exmandatario ante el Tribunal de Manhattan, en donde cumplió con todos los procedimientos del caso tras entregarse a su custodia, comenzando por la toma de sus huellas dactilares y fotografía, la presentación ante el juez Juan Merchán para la lectura de la acusación en su contra y culminando con la orden de libertad sin condición alguna emitida por este último. 

El fiscal del distrito de Manhattan sostuvo que han podido comprobar falsificación de registros comerciales en Nueva York “para ocultar información perjudicial y actividades ilegales a los votantes estadounidenses antes y después de las elecciones de 2016”, a través de la Organización Trump, entre los que se encuentran facturas del exabogado del exmandatario, Michael Cohen, o cheques del expresidente, fechados en distintos meses del año 2017.

Aseguró que, con ello, el exmandatario impidió que se conociera información que podría afectar su imagen y perspectivas electorales, tipificándose “intentos de violar las leyes electorales estatales y federales”. En tal sentido, agregó, Trump tiene una acusación ante la Corte Suprema del estado de Nueva York de falsificación de registros comerciales en primer grado.

En el escrito de acusación, Bragg señala que “según los documentos judiciales y las declaraciones realizadas en el expediente judicial, desde agosto de 2015 hasta diciembre de 2017, Trump realizó una serie de pagos que luego ocultó a través de meses de entradas comerciales falsas”.

"El acusado, en el condado de Nueva York y en otros lugares, alrededor del 14 de febrero de 2017, con la intención de defraudar y la intención de cometer otro delito y ayudar y ocultar la comisión del mismo, hizo y causó una entrada falsa en los registros comerciales de una empresa, a saber, una entrada en el libro mayor detallado del fideicomiso revocable Donald J. Trump, con el número de comprobante 842457, y conservado y mantenido por la Organización Trump", reza uno de los apartes del escrito.

A continuación, en el mismo se detallan los hallazgos o evidencias encontradas por la oficina a su cargo, así:

"En un caso, American Media Inc. (“AMI”) pagó $30,000 a un exportero de la Torre Trump, quien afirmó tener una historia sobre un hijo que tuvo fuera del matrimonio. En una segunda instancia, AMI pagó $150,000 a una mujer que alegó haber tenido una relación sexual con Trump. Cuando Trump ordenó explícitamente a un abogado que entonces trabajaba para la Organización Trump como “Asesor Especial” que reembolsara a AMI en efectivo, éste le indicó a Trump que el pago debía realizarse a través de una empresa ficticia y no en efectivo. AMI finalmente se negó a aceptar el reembolso después de consultar a su abogado y el “asesor especial” admitió que su conducta fue ilegal e hizo entradas falsas en sus registros comerciales sobre el verdadero propósito del pago de USD 150.000". 

Ese “asesor especial” al que se refiere el fiscal es Michael Cohen, otrora abogado y amigo del expresidente Trump quien, tras haber sido condenado por esa conducta ilegal, en un acuerdo con los fiscales federales se convirtió en testigo estrella contra el expresidente.

En un tercer caso, el fiscal Bragg señala que "12 días antes de las elecciones generales presidenciales, el ‘asesor especial’ transfirió $130,000 al abogado de una actriz de cine para adultos. El asesor hizo el pago a través de una corporación ficticia financiada a través de un banco en Manhattan".

Y asegura que "después de ganar las elecciones, Trump reembolsó el pago a su asesor (Cohen) a través de una serie de cheques mensuales. Primero del Fideicomiso Revocable Donald J. Trump, creado en Nueva York para mantener los activos de la Organización Trump durante la presidencia de Trump, y luego de la cuenta bancaria de Trump".

Resume que "en total, se emitieron 11 cheques con fines falsos. Nueve de esos cheques fueron firmados por Trump. Cada cheque fue procesado por la Organización Trump y disfrazado ilegalmente como un pago por servicios legales prestados de conformidad con un acuerdo de retención inexistente. En total, se hicieron 34 entradas falsas en los registros comerciales de Nueva York para ocultar el pago inicial encubierto de $130,000. Además, los participantes en el esquema tomaron medidas que caracterizaron erróneamente, a efectos fiscales, la verdadera naturaleza de los reembolsos".

Con ese sustento jurídico, el fiscal de Distrito señala en el documento de imputación que “no podemos permitir que las empresas de Nueva York manipulen sus registros para encubrir conductas delictivas. Como se describe en esta Declaración de hechos, el rastro de dinero y mentiras expone un patrón que, según alega el Pueblo, viola una de las leyes comerciales básicas y fundamentales de Nueva York. Como esta oficina lo ha hecho una y otra vez, hoy defendemos nuestra solemne responsabilidad de garantizar que todos sean iguales ante la ley”. 

Tras culminarse el procedimiento judicial, el fiscal Bragg señaló en rueda de prensa que “estos son delitos en el estado de Nueva York. Independientemente de quién seas, no puedes normalizar conductas criminales graves…Nadie está por encima de la ley".

Asimismo, aseguró que los participantes en el presunto "esquema" en el que participaba Michael Cohen sabían que los pagos a unas tres personas que tenían información negativa sobre Trump, entre ellos la actriz porno, Stephanie Clifford, conocida como Stormy Daniels, eran "ilegales".



 

La diligencia judicial

Como se había establecido, el expresidente Donald Trump se presentó ante el Tribunal Penal de Manhattan a la 1 p.m. (hora colombiana) donde se entregó voluntariamente a la justicia que lo tuvo bajo custodia (breve arresto) mientras cumplía el procedimiento judicial de su imputación. 

Así, en compañía de sus abogados y los miembros del Servicio Secreto que lo custodian por su dignidad de exmandatario, Trump fue fotografiado y tomadas sus huellas dactilares. Posteriormente fue trasladado ante el juez Merchán, donde escuchó la lectura del cargo en su contra y rompió su silencio para declararse "no culpable".

Fueron casi dos horas lo que duró todo el procedimiento judicial que concluyó con la decisión del juez de dejar en libertad y sin condicionamiento alguno al magnate y exmandatario de 76 años que de inmediato regresó a su casa Florida.

La foto de Trump con semblante serio y sentado entre sus abogados dentro de la sala de la Corte dio la vuelta al mundo y ante el rechazo del propio juez a que los medios de comunicación estuvieran presentes en el registro del exmandatario se evitó el show mediático que muchos esperaban. A la sala solo se permitió el ingreso de un grupo de reporteros gráficos.

Tanto a la llegada como a la salida del Tribunal, el expresidente Trump saludó al numeroso grupo de manifestantes que desde tempranas horas llegaron al lugar para expresarle su apoyo.

Para Todd Blanche, uno de sus abogados, aunque la "inculpación en sí es estándar", la tachó de "triste" y prometió "luchar" contra ella "con fuerza".

Tanto el expresidente, que ya fue objeto de dos intentos de destitución por el Congreso cuando era presidente (2017-2021), como sus abogados, han insistido en que este proceso es una "cacería de brujas".

El líder republicano regresó anoche a su residencia en Florida, donde también un numeroso grupo de votantes le expresaron su incondicional apoyo, mientras éste reafirmó que seguirá en la campaña electoral con la intención de volver a ocupar la Casa Blanca.

Su equipo legal evalúa el escrito de acusación para presentar los recursos judiciales a lugar para evitar el juicio. En caso de fracasar, el mismo tendrá lugar en varios meses.