EL triunfo "histórico" de la derecha española en los comicios regionales de Andalucía (sur) supone un nuevo golpe para el presidente del gobierno, el socialista Pedro Sánchez, a un año y medio de unas elecciones nacionales, que podrían suponer el regreso de los conservadores al poder.
El Partido Popular (PP) consiguió una contundente victoria el domingo en la cita electoral en este tradicional bastión socialista, haciéndose con la mayoría absoluta en el Parlamento andaluz gracias a sus 58 escaños de 109.
Del otro lado, y con apenas 30 diputados regionales, el Partido Socialista (PSOE) anotó el peor resultado de su historia en esta extensa región del sur donde gobernó sin pausa entre 1982 y 2018, antes de ser desbancado por una coalición entre el PP y los liberales de Ciudadanos.
En este país muy descentralizado, donde las comunidades autónomas disponen de amplias competencias, los resultados de las elecciones regionales y sus posibles implicaciones en el plano nacional se siguen con extrema atención.
Y este tercer revés consecutivo para la izquierda española -tras las victorias de la derecha en Madrid, en mayo de 2021, y en Castilla y León el pasado febrero-, suponen un duro golpe para Sánchez, aunque desde sus filas llaman a "no extrapolar" este resultado a nivel nacional.
¿"Cambio de ciclo"?
"Nadie puede negar que una diferencia tan abismal entre el PP y el PSOE en dos de las tres comunidades más pobladas (Madrid y Andalucía) es algo más que un tropiezo", ayer el diario El País, que calificó de "histórico" el triunfo del PP en su portada.
"Puede ser el síntoma de un cambio de ciclo", añade el periódico de centro-izquierda, usando una expresión que retoma también el conservador ABC.
Para Pablo Simón, profesor de Ciencias Políticas en la Universidad Carlos III de Madrid, este nuevo "ciclo", con "una derecha más fuerte", ya había comenzado antes de las elecciones andaluzas, con la contundente victoria del PP hace un año en la región de Madrid.
Este impulso renovado podría culminar con la victoria de los conservadores en las elecciones nacionales previstas para finales de 2023. Sí, "podremos ver al PP como la fuerza más votada" en esos comicios, añade el analista.
Mientras, la izquierda se enfrenta a una "tendencia de fondo": "han sido cuatro años muy duros con la pandemia, la guerra" en Ucrania, que ha disparado la inflación, subraya de su lado Cristina Monge, politóloga de la Universidad de Zaragoza.
Monge rechaza, sin embargo, "hacer un paralelismo al nivel nacional" entre Andalucía y España, ya que, según apunta, aún "queda mucho tiempo" antes de las próximas elecciones.
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Conservadores…en tierra derecha
Tras gobernar España entre 2011 y 2018 con Mariano Rajoy, el PP salió del poder por la moción de censura que presentó Sánchez en el Parlamento al conocerse la condena a la formación en un mega-proceso de corrupción que salpicó a numerosos miembros de su estructura.
A su abrupta marcha del gobierno le siguió una árida travesía por el desierto que le llevó a los peores resultados de su historia en las legislativas de 2019, ganadas por los socialistas de Sánchez.
Los conservadores, sin embargo, han conseguido recuperar el pulso, ahora con el moderado Alberto Núñez Feijóo al frente, tras la polémica salida del controvertido Pablo Casado en abril. En plena recuperación, desde sus filas ya ven esta victoria en Andalucía como una etapa clave para su regreso al poder.
"Ayer el Partido Popular dio un paso decisivo y firme para que Sánchez salga de la Moncloa", sede del gobierno español, afirmó Elías Bendodo, miembro de la dirección del partido. Además, dijo que un resultado similar podría logarse en unas generales porque lo que acaba de ocurrir en Andalucía es una demostración que el PP “no tiene techo”.
Insistió el dirigente conservador el "modelo sanchista" está "agotado" y recalcó que los resultados "históricos" del Partido Popular suponen "un modelo perfectamente identificable con el de Juanma Moreno en Andalucía (será reelecto como presidente de la Junta) y Feijóo en España". A su entender, lo que ha ocurrido en Andalucía es "muy sintomático" de hasta dónde puede llegar el "apoyo transversal" del PP.
Además, indicó que los datos en Andalucía son también un ejemplo de que "cuando el PP trabaja con unidad es imbatible". "El PP siempre ganó unido y centrado…El partido debe tener siempre un pie en el centro y con el otro pie puede pivotar a derecha e izquierda".
Después de 37 años de gobierno socialista en Andalucía, Bendodo destacó que los resultados demuestran que esta comunidad "no es el cortijo de ningún partido" salvo de los que "saben gestionar y solucionar los problemas de los ciudadanos".
El también consejero de Presidencia de Moreno expresó que se trata del "mejor resultado de su historia" del PP en esta tierra, que ha ganado en todas las provincias por encima del 40% de los votos, incluso en plazas históricas de PSOE como Sevilla, donde los 'populares' no habían vencido nunca en democracia.
Además, ha destacado que el PP ha ganado en 567 municipios andaluces, "en más del 70%", entre ellos "feudos del socialismo como Dos Hermanas". "Está claro que Moreno ocupa con claridad el centro del tablero político y ha abierto la puerta a muchos votantes del PSOE que no reconocen a su actual partido ni a su actual líder", indicó.
Según Bendodo, los andaluces han premiado "la buena gestión", con bajadas impositivas, y contar con un gobierno que "resuelve los problemas", y no los crea. Además, reiteró que los ciudadanos están "cansados" y "hartos de trincheras" y quieren gobiernos "capaces de pactar y dialogar con todos" como, a su entender, ha hecho Moreno en la pasada legislatura.
La mayoría absoluta conseguida en Andalucía, evitó a los conservadores tener que gobernar en coalición con la extrema derecha de Vox, como sí se vio obligado en Castilla y León.
Por su parte el candidato conservador a la reelección como presidente de la junta andaluza, Juanma Moreno, consideró que esta comunidad demuestra una vía para reagrupar el centro derecha por el carril central.
En una entrevista con la Cadena Cope, sostuvo que “hemos abierto una vía de reagrupar el centro derecha, que una es una vía viable y por el carril central, ese carril central que es ancho, amplio, cómodo y que está bien perimetrado".
PSOE responde
Por su parte los derrotados socialistas negaron que haya cambio de ciclo político después tras la jornada andaluza y que no se puede ‘especular’ que ese será el comportamiento en unas elecciones generales. Además, apostó por responder con recetas de izquierdas, apuntando la posibilidad de incluir nuevas medidas en el próximo Real Decreto para paliar los efectos de la guerra, "que el Gobierno está dispuesto a estudiar".
Así lo dijo el portavoz del PSOE, Felipe Sicilia, después de la reunión de la Ejecutiva socialista presidida por Pedro Sánchez, quien aseguró que el Gobierno está fuerte y sólido y tiene previsto agotar la Legislatura.
El dirigente socialista ha asegurado que tanto él como el resto de sus compañeros de la dirección del PSOE han coincidido en que ha habido "dos elementos clave" que han influido en que hayan cosechado el peor resultado de la historia del partido en esta comunidad autónoma.
Se trata, según precisó, de la desmovilización del electorado de izquierda porque el candidato socialista tuvo pocos meses para exponer su alternativa y por la división de los partidos a la izquierda del PSOE, que al dividir el voto propició el avance de los conservadores.
Pero más allá de esta obvia reacción del partido gobernante, analistas políticos coinciden en que los conservadores están recuperando terreno con Feijóo y que son una real alternativa de poder.