Un lugar de contrastes. Así es el departamento de Santander, el cual brinda desde tranquilidad en lugares como Barichara, hasta adrenalina con deportes extremos como rafting y parapente en San Gil.
En esta oportunidad, Fontur y el Instituto Municipal de Cultura y Turismoo de Bucaramanga invitan a conocer la bella “ciudad de los parques”.
La capital del departamento, más conocida por su gran oferta y calidad de productos en cuero tales como zapatos, correas y bolsos, también le apuesta a ofrecer un turismo vivencial.
Los turistas aventureros y conocedores pueden iniciar su recorrido por el comercio bumangués en bicicleta, desde el corazón de la ciudad, gracias a los préstamos de este medio de transporte que hace Alcaldía de Bucaramanga en diferentes puntos del municipio.
Para quienes quieran vivir esta experiencia, podrían empezar el recorrido en el Parque Santander y visitar los lugares más emblemáticos, entre ellos, la Catedral de la Sagrada Familia, la cual tomó casi 50 años para ser construida desde 1898.
Estos ciclopaseos no tienen límite de edad, ya que los trayectos son de baja complejidad y cuentan con el acompañamiento de la policía, que garantiza la seguridad de los turistas.
Continuando con el recorrido por el centro de Bucaramanga, bajo una temperatura de 27 grados centígrados, se puede observar varios murales hechos por la misma comunidad con residuos de cuero y suelas de zapatos, los cuales son el resultado de las iniciativas de turismo comunitario que la administración está impulsando.
Lo mejor del bicipaseo es llegar al puente Bicentenario, con sus maravillosas luces de colores que se encienden sobre las 6:00 p.m, aproximadamente, convirtiéndolo en uno de los principales atractivos del lugar.
Aunque de noche en Bucaramanga no se siente frío, el broche de oro es su magestuoso café proveniente de la Finca el Roble, de la Mesa de Los Santos, la cual produce el tercer mejor café orgánico del mundo, con su variedad HR61 o Umpalá.
Este café contiene entre su sabor finas notas florales y frutales, las cuales adquiere de manera natural por la particularidad de su semilla y la forma de cultivo.
El primer lote de Umpalá fue vendido en 130 dólares la libra, convirtiéndolo en uno de los cafés más caros del mundo, después del Moca, de Guatemala, el cual está avaluado en 500 dólares la libra, y el Geisha de Panamá que cuesta 350 dólares la libra.
El mejor café de Colombia
La finca El Roble tiene una extensión de 330 hectáreas de siembra de café, las cuales se pueden recorrer en un Jeep, mientras se observa el imponente paisaje cafetero.
La experiencia es incomparable, al ver la cantidad de coloridas flores que acompañan el cultivo de granos de café entre maduros y verdes, así como el sonido de las 123 especies de aves que habitan el lugar.
Como dato curioso, en el “Coffee Garden” los visitantes pueden avistar el cultivo de las más de 70 variedades de café y las particularidades de cada una.
Lugares emblemáticos
Un lugar admirable, donde se puede observar la arquitectura tradicional bumanguesa, es el Club del Comercio, el cual se fundó en 1872 y solamente los comerciantes más influyentes de la región tenían acceso a él.
Este histórico sitio está compuesto por amplios espacios catalogados como salones; entre ellos los más resaltantes son el de las mujeres, el de los fundadores y la marquesina. En estos escenarios se preserva la esencia de la época, con sus lujos y sus muebles característicos.
Actualmente, el club del comercio es utilizado para desarrollar reuniones y recepciones de distintos eventos.
Desde el Centro Cultural, los visitantes tienen la oportunidad de disfrutar de diferentes exposiciones artísticas y culturales. Entre ellas, se puede recorrer una sala con una muestra fotográfica sobre los oficios tradicionales, que incluye breves descripciones de estas labores tan peculiares, como la de la rezandera o el sobador, e imágenes de las personas que los realizaban. Se trata de trabajos que por tradición cultural eran de vital importancia, ya que desde sus conocimientos sanaban a la comunidad.
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Comuna 14
El turismo comunitario juega un papel fundamental en Bucaramanga. En varias oportunidades los Guardianes del Bosque y del Agua llevan a los viajeros a conocer la esencia del lugar.
El parque de Morrorico es, para la comuna bumanguesa, lo que es Monserrate para Bogotá. En este lugar se ubican las 15 estaciones del viacrucis, donde los fieles, en Semana Santa, hacen el recorrido.
Desde el inicio de la subida, se puede observar una gran variedad de aves que habita el lugar. En este sendero hay pájaros carpinteros, los cual están considerados en vía de extinción.
En la parte alta del lugar se encuentra la estatua del Sagrado Corazón de Jesús. Desde allí un magnífico mirador permite visualizar en 360 grados la comuna.
Sabores memorables
En cuanto a sabores típicos de la región, la Plaza Central es la mejor opción. En este lugar los comensales pueden disfrutar de platos tradicionales como la carne de cordero frita, asado o al horno, carne oreada, las tradicionales arepas santandereanas, mute, pepitoria y tamal santandereano.
Para los paladares más exigentes y catadores de los mejores chicharrones, el lugar recomendado es “Cotiza Longaniza”. En este lugar se encuentra la mejor picada y fritanga bumanguesa, compuesta por crocantes papas criollas, rellena, chorizo, longaniza, carne de res, carne de cerdo y los famosos chicharrones carnosos.
¡Sin embargo, lo más tradicional de esta región son las hormigas culonas, las cuales se comen a modo de pasabocas y se les atribuye beneficios afrodisíacos. Esta tradición acompaña a los santandereanos desde la época de los indígenas Guane.
Según muchos visitantes, la comida rápida de Bucaramanga es la más rica de Colombia. En el paso por esta ciudad se podrá probar las famosas hamburguesas de El Garaje y su especialidad, la “Rock Burger”. Sin duda se puede recibir una porción muy generosa que, acompañada de papas a la francesa y jugo de mandarina, ofrece na exquisita combinación.