Romain Bardet fue el vencedor en la primera etapa del Tour de Francia 2024, este sábado en Rimini (Italia), donde el ciclista francés se vistió además con el primer maillot amarillo de líder de la general.
Su actuación en esta etapa inicial fue espectacular: se escapó del pelotón a 50 kilómetros de la meta y el escalador del DSM, de 33 años, terminó imponiéndose en la meta a su compañero de equipo neerlandés Frank van den Broek, con apenas cinco segundos de ventaja sobre el grupo de favoritos, que no consiguió alcanzar finalmente a los dos destacados.
🏆 🇫🇷 @romainbardet wins in Rimini! It’s a @dsmfirmpostnl masterpiece!
— Tour de France™ (@LeTour) June 29, 2024
🏆🇫🇷 @romainbardet s’impose à Rimini ! Chef d’oeuvre de l’équipe @dsmfirmpostnl !#TDF2024 pic.twitter.com/8qri9w823N
En un final emocionante, los dos hombres del DSM resistieron los ataques y Van den Broek brindó la victoria de etapa a su líder al término de una jornada disputada con altas temperaturas y que fue un calvario para numerosos corredores, aunque no para los principales favoritos.
Es la cuarta victoria de etapa para Bardet en un Tour, una carrera en la que llegó a terminar segundo de la clasificación general en 2016 y 2017. Sin embargo, nunca había conseguido vestir el maillot amarillo hasta ahora.
Este Tour es el último de su carrera, ya que hace unos días anunció que tiene pensado retirarse en junio de 2025.
Esta etapa era muy dura para ser la de apertura de una gran ronda y el calor la dificultó todavía más en la travesía del pelotón y de los escapados desde Florencia hasta Rimini, en la costa del Adriático, en una etapa en la que se pasó además por San Marino, que se convirtió en el 13º país extranjero que visita el Tour de Francia en su historia.
Por su parte, Egan Bernal (Ineos) estuvo muy involucrado y conservó energías en el grupo principal después de una intensa lucha en siete puertos de montaña de menor dificultad.
El ritmo fue tan intenso que Santiago Buitrago (Bahrain) perdió contacto con el grupo principal, pero luego logró recuperarlo con la ayuda de sus compañeros de equipo.
La segunda etapa del Tour de Francia, que tendrá un recorrido de 199 kilómetros entre Cesenatico y Bolonia, propondrá el primer verdadero puerto de montaña de la carrera con la difícil subida en San Luca, en el norte de Italia.
Con una distancia de dos kilómetros y una pendiente media del 10,6%, la subida hasta la basílica de San Luca promete ser uno de los momentos destacados de esta primera semana del Tour. En algunos tramos su inclinación supera el 20%.
La mayoría de los corredores conocen esta exigente subida, habitual en los recorridos del Giro de Italia o del Giro de Emilia.