La confianza de los empresarios siguió con su tendencia negativa en marzo. De acuerdo con Fedesarrollo en los resultados de la Encuesta de Opinión Empresarial (EOE), el Índice de Confianza Industrial (ICI) registró un balance negativo de 0,9 puntos. Este resultado implica un retroceso de 0,8 puntos frente al resultado de febrero (-0,1) y de 5 puntos en comparación con el registro de marzo de 2016 (4,1).

Todos los componentes del ICI registraron desempeños menos favorables este mes. El cambio más significativo lo experimentó el componente de expectativas al pasar de 31,6 en febrero a 28,7 este periodo. Por otra parte, el volumen actual de pedidos recibió un balance de -26, ligeramente inferior al registrado en febrero (-25,1). Por último, la evaluación del nivel de existencias de estos agentes exhibió un comportamiento positivo al reducirse 1,4 puntos con respecto al segundo mes del año.

 Por otra parte, el Índice de Confianza Comercial (ICCO) se ubicó en 18,6. Esta lectura representa un descenso de 4,6 puntos en el indicador con respecto al resultado de febrero (23,2) y se ubica 6,9 puntos por debajo del registro del mismo mes del año pasado. El registro de este mes representa se configura como el más bajo desde agosto de 2015, cuando el indicador se ubicó en 17,8.

El comportamiento de este mes se explica por un menor desempeño en los tres componentes del ICCO. Frente al mes anterior, el rubro más afectado fue el nivel de existencias que pasó de 11,1 a 17,7 en el tercer mes del año. Además, la percepción de los empresarios del sector acerca de la situación actual obtuvo un balance de 39,4 en este periodo, lo cual representa un descenso de 3,1 puntos con respecto a febrero.

Expectativas

En esta ocasión, luego de dos meses consecutivos en recuperación, las expectativas de los empresarios del sector comercial cedieron terreno. En febrero, este componente recibió un balance de 38,1, el más alto en 5 meses. En el tercer mes del año se evidenció un retroceso de 3,9 puntos en este rubro. Consideramos que estos agentes prevén una recuperación más lenta de la demanda interna, por cuenta de la persistencia de los altos costos del crédito y la permanencia de la confianza del consumidor en niveles mínimos históricos.

Estos índices, al ser indicadores líderes de su sector, nos dan un indicio de que el comportamiento negativo de estos sectores se prolongó por tercer mes consecutivo. Vale la pena mencionar que en los dos primeros meses del año la industria y el comercio se contrajeron en promedio 1,8% y 4,7% anual, respectivamente.

La reducción de la tasa de intervención por parte del Banco de la República será definitiva para el comportamiento de estos sectores en los meses venideros. A medida que la tasa de interés de referencia abandone el terreno contractivo en el que se encuentra actualmente, la demanda por crédito se dinamizará y favorecerá las decisiones de consumo de los hogares y las empresas que se han visto condicionadas por el efecto del incremento del IVA, la depreciación del tipo de cambio y el incremento en el precio de los insumos de producción.

Finalmente, ante los desarrollos recientes que se han dado en estos sectores, revisamos a la baja su crecimiento para 2017. Por un lado, redujimos 10 pbs nuestra estimación de crecimiento para el comercio hasta 1,3% para todo el año, lo cual implica una desaceleración de 50 pbs con respecto al resultado de 2016 (1,8%). Entre tanto, nuestra expectativa de expansión del sector industrial descendió desde 2,3% hasta 1,3% para todo 2017, 170 pbs inferior al desempeño exhibido durante 2016 (3%).