A CINCO días para que llegue de nuevo Donald Trump a la Casa Blanca, AmCham Colombia presentó un análisis sobre el impacto que puede tener este segundo gobierno en nuestro país.
Lo primero que expuso es que las medidas proteccionistas en el comercio internacional, incluyendo el aumento de aranceles por parte de Estados Unidos hacia México, Canadá y China, sumadas a los conflictos geopolíticos, representan para Colombia un abanico de oportunidades. Estas deben ser aprovechadas por los empresarios para posicionar al país como un socio estratégico en sectores clave, especialmente en el contexto de reactivación económica nacional.
Un análisis realizado por AmCham sobre el impacto del segundo mandato de Donald Trump, quien asumirá el cargo el próximo 20 de enero, identificó 144 partidas con Ventaja Comparativa Revelada (VCR) frente a China, 43 frente a Canadá y 37 frente a México. Según María Claudia Lacouture, presidenta de AmCham Colombia, estos productos, pertenecientes a sectores como agroindustria, textiles, manufacturas, productos químicos, plásticos y bienes de valor agregado, destacan a Colombia como un proveedor competitivo para el mercado estadounidense.
Oportunidades en un mercado diverso
El documento subraya que estas oportunidades no se limitan a unos pocos estados en Estados Unidos. En total, 23 estados, incluidos mercados clave como Florida, Texas, California y Nueva York, muestran interés en adquirir productos colombianos. “Estos estados, por su tamaño económico, cercanía geográfica y altos índices de consumo de bienes importados, ofrecen un amplio panorama para que las empresas colombianas amplíen su alcance y encuentren nichos de mercado en diversas regiones de Estados Unidos”, afirmó Lacouture.
Además, las oportunidades no se concentran exclusivamente en las regiones más industrializadas de Colombia. Aunque Antioquia, Bogotá, Valle del Cauca y Atlántico lideran en número de productos con VCR, cada departamento tiene potencial de exportación. “Incluso regiones como Arauca, Caquetá, Casanare y Putumayo pueden diversificar su producción y competir en mercados internacionales con productos como cacao, frutas tropicales, aceites esenciales o derivados del petróleo”, añadió Lacouture.
La cercanía como ventaja estratégica
Aunque frecuentemente se destaca la vecindad de México con Estados Unidos y las ventajas que esto ofrece, Colombia no queda rezagada. Con apenas dos horas y 25 minutos de vuelo hacia Estados Unidos, una mano de obra competitiva y una red de empresarios decididos a crecer, el país cuenta con factores clave para sobresalir en la región.
Lacouture resaltó que ante las tensiones geopolíticas actuales podrían convertirse en una oportunidad para la exploración de nuevas rutas y alianzas comerciales como la Alianza del Pacífico. “Esta es una oportunidad para que Colombia, Perú y Chile lleguen a nuevos mercados sin olvidar la costa oeste de Estados Unidos”, comentó.
Aunque las políticas de “América Primero” priorizan la protección de industrias estadounidenses críticas, Colombia enfrenta una vulnerabilidad limitada, ya que no exporta significativamente bienes sensibles. Además, el Tratado de Libre Comercio entre ambos países ofrece un marco jurídico que protege de barreras unilaterales, garantizando estabilidad en el comercio y la inversión incluso ante tensiones políticas entre los presidentes Trump y Petro.
Para maximizar estas oportunidades, Colombia debe implementar estrategias que incluyan a todas las regiones, fortalezcan su infraestructura, impulsen la asociatividad, ofrezcan seguridad jurídica y económica, y fomenten la innovación.
En el sector servicios, el país tiene un gran potencial para posicionarse como proveedor de soluciones digitales, outsourcing y tecnología avanzada, alineándose con las demandas de un mercado estadounidense en evolución.
“Colombia ya mantuvo una relación respetable y fructífera con la primera Administración de Trump. El reto ahora será construir acuerdos que combinen las prioridades de ambas naciones, priorizando temas como migración, seguridad, narcotráfico y comercio justo. Es más, lo que nos une que lo que nos separa y el trabajo conjunto entre empresarios de ambos países será un puente de oro para aprovechar las oportunidades de beneficio mutuo. Aprovechémoslas”, puntualizó Lacouture.