Pese a ligeros incrementos del crecimiento económico en los últimos meses, esos signos no son suficientes como para disparar el empleo y reducir significativamente la tasa de desocupación.

Ante esta situación, se proyecta que el desempleo no bajaría de 11,9 % en 2024 y de 12,9 % para diciembre de 2025, según un análisis del centro de pensamiento de ANIF. Considera la entidad que, a pesar de que las cifras de crecimiento han mostrado ligeros signos de recuperación, no son suficientes como para disminuir la desocupación y aumentar la generación de puestos.

“La bonanza de crecimiento experimentada en 2022 y la primera mitad de 2023 ha comenzado a disiparse. Dado que el mercado laboral reacciona de manera rezagada al crecimiento económico, esta tendencia, según nuestras proyecciones, influirá significativamente en el nivel de ocupados en el futuro próximo”, asegura el informe.

Sectores

Consideran que “el sector agropecuario, altamente intensivo en mano de obra y de menor valor agregado, presentó el menor valor del producto interno bruto (PIB) por trabajador de la economía. Aunque el sector agropecuario en Colombia está experimentando un proceso de industrialización e innovación, su dependencia de mano de obra impide que dichos avances se puedan traducir en un incremento significativo en la productividad, dada la cualificación de su fuerza de trabajo”

Señalan que “este mismo indicador para los departamentos muestra un primer indicio de las diferencias en productividad regional. Los departamentos con mayor PIB por ocupado para el 2023 fueron Santander y Valle del Cauca, mientras que Atlántico tiene el menor indicador entre aquellos departamentos que presentan niveles de productividad superiores al promedio nacional. No obstante, cabe resaltar que, para los principales departamentos del país, el PIB por trabajador es mayor al nivel nacional, lo que indica que en el resto de los departamentos del país se tienen niveles de productividad más bajos, reflejando las diferencias en desarrollo y crecimiento económico y por ello en la generación de empleo”.

Las cifras presentadas evidencian las disparidades a nivel regional y por actividad económica, y que un mayor número de empleados en ciertas actividades no implica un incremento en su nivel de productividad, medida en términos de PIB por trabajador. Esto significa que, aunque haya más puestos de trabajo debido a la desigualdad en el desempeño económico, esto no se traduce automáticamente en un aumento en la productividad. En este contexto, más empleo no equivale automáticamente a mayor eficiencia productiva.

Mediciones

Señala el análisis, que otra forma de ver lo que pasa con el desempleo es con mediciones en lo que pasa con el salario mediano por hora trabajada. De acuerdo con esta estimación, a nivel nacional las actividades que ofrecen una mejor remuneración por hora son la administración pública, que no es gran generadora de empleo, y muy detrás está el sector privado.

Por otra parte, en un informe del Banco de la República sobre el mercado laboral, estimaba que la tasa de desempleo urbano se ubicaría entre el 9 y el 12,1 %. Sin duda, la tasa de desempleo nacional superaría a la urbana, y llegaría a una cifra de 12,4 %, con 10,8 % como la más probable. “Lo anterior se explica, en parte, por el deterioro del mercado laboral rural que se ha registrado durante los últimos meses”, explicó la entidad.

Agrega el informe que estas previsiones son consistentes con los pronósticos de crecimiento económico para 2024, que fueron sugeridos por el equipo técnico del Banco de la República. La entidad predijo en su Informe de Política Monetaria un crecimiento del producto interno bruto del 0,8 % para 2024, lo cual representa un leve aumento frente al 0,6 % del año pasado.

De tal manera que, para el Emisor, la tendencia del deterioro en el mercado laboral se viene experimentando desde finales de 2023, algo que está en línea con el deterioro de la actividad económica.