* Liga regresa con partidos sin público
* Estrictos protocolos de bioseguridad
El próximo 12 de septiembre se reanudará el fútbol profesional en nuestro país. Tras más de cinco meses de suspensión por la pandemia del Covid-19, el que es sin duda el deporte más seguido por los colombianos se reactiva con un partido entre Millonarios y Deportivo Cali en la capital vallecaucana. Es un cotejo aplazado desde el pasado 18 de marzo, cuando el país entró en emergencia tras confirmarse los primeros casos de coronavirus. De hecho, antes del reinicio del campeonato local se dará la definición de la Superliga, en partidos de ida y vuelta los días 8 y 11 de septiembre entre Junior y América. Esto significa, entonces, que dentro de cinco días vuelve el balompié, lo que se constituye en una muy buena noticia no solo para los equipos y los millones de aficionados, sino para todos los colombianos que poco a poco ven que se empieza a retomar la normalidad deportiva y crece la luz de esperanza en torno a la posibilidad de ir superando el coletazo de la emergencia sanitaria de forma gradual y segura.
No ha sido fácil llegar hasta esta instancia. De hecho, el Ministerio de Salud y la Dimayor tardaron tres meses en definir los protocolos de bioseguridad, tanto para las fases de entrenamientos grupales en los equipos como para retomar la competencia oficial. Los partidos se jugarán a puerta cerrada, tal como ha ocurrido en las ligas europeas, que fueron las primeras en retomar sus calendarios. De igual manera, se regulan de manera muy puntual todas las normas de precaución sanitaria, distanciamiento y procesos logísticos y de vigilancia del personal autorizado para entrar a los estadios. No se está dejando ningún aspecto al azar y por ello el reglamento comprende hasta los más mínimos detalles que rodean la práctica del futbol a nivel profesional.
Tanto la Dimayor como el Gobierno nacional, así como las alcaldías municipales y distritales en donde funcionan y compiten los 36 clubes profesionales se han comprometido a ejercer un seguimiento permanente y garantizar el cumplimiento de estos protocolos, según quedó consignado en la Resolución 1507 del pasado 31 de agosto. Dicha norma es muy específica sobre los compromisos que cada club y jugador debe seguir al pie de la letra en materia de bioseguridad en las sedes, los camerinos, los campos de entrenamiento, los escenarios de competencia, los desplazamientos así como el conjunto de medidas que deben de aplicarse durante la antesala, el desarrollo y la posterioridad de cada partido. De igual manera, están claramente señalados los procedimientos para el manejo de casos sospechosos o confirmados del virus entre jugadores, cuerpo técnico y demás personal logístico y de servicios.
Lo más importante es que mantener en actividad el balompié profesional termina siendo un compromiso de todos. Por ejemplo, si bien es cierto que los encuentros se van a jugar sin hinchas en las tribunas, es necesario que cada uno de los equipos entable con sus respectivas barras diálogos constructivos que eviten que los aficionados se concentren en las afueras de los estadios o protagonicen aglomeraciones en las sedes de los clubes, aeropuertos o las rutas por donde se van a movilizar los jugadores y equipo técnico. Este es un aspecto clave toda vez que en Europa se está culpando a las reuniones de las hinchadas de ser uno de los focos de rebrote del virus en países que pasaron el pico de la pandemia hace varios meses.
Como se ve, todo está calculado para que el fútbol profesional se reanudé en Colombia a partir de la próxima semana y que los goles, las jugadas y la pasión por el balón alegren a millones de compatriotas que han pasado difíciles momentos en estos cinco meses de pandemia. Pero es necesario reiterarlo: mantener rodando el balón es una responsabilidad colectiva. Hay que revisar lo que ha pasado en Europa recientemente, en donde la no aplicación estricta de los protocolos de bioseguridad ha llevado a que surjan nuevos casos de infecciones en los equipos, siendo el último y más sonado esta semana nada menos que el de la estrella brasileña Neymar, del PSG francés que disputó hace dos semanas la final de la Liga de Campeones, que ganó sobradamente el Bayern Múnich.
Así, pues, bienvenido el reinicio del fútbol profesional en Colombia. Hacía mucha falta y está en manos de todos garantizar que no se vuelva a ir.