El Instituto Nacional de Vigilancia de Medicamentos y Alimentos (Invima) y el Ministerio de Salud emitieron una alerta conjunta sobre desabastecimiento inminente de tres medicamentos fundamentales para el tratamiento del VIH en pacientes pediátricos.
Según el informe del 1 de enero de 2024, estos medicamentos enfrentan desabastecimiento o riesgo inminente:
La situación crítica se atribuye en gran medida a la cancelación de registros sanitarios por parte del Invima a algunas entidades que no cumplían con los requisitos para la fabricación de estos medicamentos. Solo tres farmacéuticas cuentan con registros sanitarios vigentes, y un proceso está en curso con resolución esperada en los próximos días.
El Ministerio de Salud, en colaboración con el Invima, realiza un exhaustivo análisis de la situación. Se solicitó la inclusión en el listado de medicamentos vitales no disponibles para garantizar su importación bajo circunstancias específicas, como "paciente específico" o "urgencia clínica". Se establecieron requisitos claros para la autorización de importación, asegurando un proceso ágil y eficiente.
HUMAX, titular de registro para Lamivudina y Zidovudina, confirmaron la disponibilidad a partir del 23 de enero de 2024. Para Nevirapina, se espera la revisión y emisión del concepto por parte del Invima para su inclusión en el listado de medicamentos vitales no disponibles.
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La crisis revela una pérdida de interés en el mercado de estos medicamentos, posiblemente debido a su bajo costo y la relativamente pequeña población pediátrica afectada. Además, se observa una concentración del mercado en uno o dos titulares de registro sanitario, con una disminución significativa en las unidades comercializadas en los últimos años.
La escasez de estos medicamentos es de especial preocupación, ya que se utilizan en el tratamiento del VIH en neonatos expuestos por vía materno infantil y en niños menores de 18 meses. El Invima destaca la importancia de mantener estándares rigurosos para garantizar el suministro continuo de estos medicamentos vitales.
El Ministerio de Salud y Protección Social, junto con el Invima, continuará monitoreando la situación y tomará medidas para favorecer la disponibilidad de estos medicamentos críticos en el país. Mientras tanto, la comunidad médica y la población afectada permanecen atentas a la evolución de esta crisis en la atención de la salud pública.