El presidente Iván Duque se reunió en secreto con Rodrigo Londoño, jefe del partido de las Ex Farc y Pastor Álape ante el jefe de la delegación de verificación de la ONU, por más de dos horas, con el propósito de tratar la implementación de los acuerdos de paz y las garantías de los ex combatientes. 

A la reunión que se realizó en la residencia de Ruiz Massieu, en el norte de Bogotá, también asistió el Alto Comisionado de paz, Miguel Ceballos; la jefe del gabinete, María Paula Correa; Emilio Archila, consejero Presidencial para la Estabilización y la consolidación. 

Dentro de los temas que se trataron fue la preocupación y los obstáculos en la implementación de los acuerdos de paz, muerte de los excombatientes en proceso de reincorporación y algunos reparos con los proyectos productivos, este diálogo se dio de manera franca y abierta.

El presidente Duque fue claro sobre la implementación del acuerdo de paz es un trabajo conjunto, punto que fue bien recibido por las ex-Farc. Duque también recalcó que se deben reconocer no solo los avances sino el hecho de que este gobierno se encargó de configura y darle aplicabilidad a los acuerdos de paz; así como la hoja de ruta sólida que deja para que la nueva administración avance.

Por su parte, Rodrigo Londoño expresó que la principal preocupación qué el tiene es la seguridad de los excombatientes y las garantías económicas adecuadas para la reincorporación de la vida civil.  a lo que el presidente Duque confirmó que los pagos mensuales a los excombatientes, se extenderán hasta el final de su mandato. 

Pastor Álape dice que estos encuentros permiten la construcción de paz, fortalecimiento de la democracia y la reconstrucción de país.  

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