Tanto el ministro de Defensa, Luis Carlos Villegas, como el comandante de las Fuerzas Militares, general Alberto Mejía, descartaron ayer que exista un plan de las disidencias para refundar la guerrilla de las Farc, y aseguraron que el accionar de estos grupos apunta a participar en el negocio del narcotráfico.
Destacaron que antes de crecer en tamaño su número se está marchitando por los golpes que le ha propinado la Fuerza Pública.
Sin embargo Ariel Ávila, subdirector de la Fundación Paz y Reconciliación, ONG que ha estudiado a fondo el conflicto armado en Colombia, previno que el Gobierno entrante debe tener cuidado con los ajustes que ha anunciado, le hará a los acuerdos de paz, ya que podrían provocar que más excombatientes que hacen parte del proceso de pacificación terminen en las disidencias.
El ministro Villegas anunció que casi todos las Grupos Armados Organizados (GAO) han ido perdiendo hombres en sus filas.
Aseguró que actualmente el Eln tiene 2,4% menos integrantes que el año pasado; el GAO residual perdió 10,7%; ‘Los Puntilleros’, 14%; y el ‘Clan del Golfo’, que cuenta actualmente con 1.423 integrantes, ha disminuido en un 19% en hombres dentro de sus filas.
Asimismo, dijo que el Gobierno está listo desde el punto de vista “logístico y de seguridad” para acoger a los miembros del ‘Clan del Golfo’ que quieran “someterse a la justicia”.
El encargado de la cartera de Defensa también señaló en lo que va de 2018 que 780 integrantes del ‘Clan del Golfo’ han sido capturados, 390 residuales han contado con la misma suerte, así como 36 integrantes de ‘Los Pelusos’ y 114 de ‘Los Puntilleros’.
“1.899 integrantes del crimen organizado han sido neutralizados en 2018 (...) Durante lo que va del año la Fuerza Pública ha incautado 18,5 toneladas de explosivos GAO”, indicó Villegas.
Y así continuó: “El ánimo de mando y control que han querido tener los residuales ha sido impedido por la Fuerza Pública (...) Esos grupos no tienen unidad de mando y control ni lo van a tener porque la Fuerza Pública no se lo va permitir. Hay amenazas más grandes y concretas que han sido frustradas por los integrantes de las Fuerzas. Los residuales están marchitándose gracias a la Fuerza Pública (...) y las rutas del narcotráfico son cada vez más intervenidas por las autoridades y la Fiscalía”.
El Ministro anotó también que “los grupos ilegales siempre tienen intención de consolidarse”, pero remarcó que hoy las disidencias de las Farc no son una amenaza para la seguridad nacional.
Añadió sobre el número de integrantes que tendrían estas disidencias, que “por información de inteligencia” consideran “que esta estructura llega a 1.200 hombres”.
En la lista de quienes serían los hombres detrás del plan de refundación de las Farc están alias ‘Gentil Duarte’, ‘Rodrigo Cadete’, ‘Jhon 40’, ‘Guacho’ y ‘Cabuyo’, hombres que quisieran asumir el mando, pero que no tiene aún un acuerdo de liderazgo para las disidencias.
Finalmente insistió en que se mantiene, además, la operatividad para impedir que disidentes consoliden el plan de rearmar las extingas Farc.
La revista Semana publicó en días pasados que existiría un plan de las disidencias que no entraron en el acuerdo de paz para refundar las Farc. No obstante el general Mejía también enfatizó que está descartado este hecho.
"No hay un plan para refundar las Farc; hay un plan para potenciar el narcotráfico, para articularse con el crimen organizado transnacional, para dominar toda la cadena del narcotráfico en ciertas regiones del país", afirmó el General de las Fuerzas Militares a W Radio.
Las Farc, el que fuera el grupo rebelde más poderoso de América, que por medio siglo fracasó en su intento de tomar el poder para sí en Colombia, se desarmó y transformó en partido político como parte del acuerdo de paz suscrito a finales de 2016.
Según inteligencia militar, los disidentes operan sin mando unificado y cuentan con un pie de fuerza de 1.200 combatientes distribuidos en territorios claves para el narcotráfico o la minería ilegal.
Citando “cifras de centros de análisis y agencias de inteligencia extranjeras”, la revista Semana asegura que los disidentes hoy rondan “los 4.000 hombres”.
"Los grupos están trabajando unidos, recogiendo plata y moviendo sus bases entre las comunidades. Incluso tendrían una fecha próxima para la reunión que marcaría el resurgimiento", dice la revista.
El último conteo de disidentes "baja a 1.200", insistió el general Mejía.
Por su parte, el presidente electo Iván Duque dijo ayer que “(…) hay algunos que se rehúsan a entregar las armas de la violencia y quieren seguir el camino de perseguir al ciudadano. Cualquier forma de criminalidad debe ser rechazada, cualquier forma de violencia debe ser rechazada, y por eso tenemos que ser claros que en muchos lugares del territorio se está viendo crecer nuevamente esas manifestaciones”.
Precisó que si bien es “un triunfo que logremos acallar los fusiles de quienes han estado atentando contra la sociedad”, quienes reincidan deben ser sancionados con el rigor de la Ley.
Más adelante, el candidato perdedor a la Presidencia de Colombia y senador electo, Gustavo Petro, aseveró: “Hay que llamar las cosas por su nombre. No son 29 estructuras, son 29 frentes activos de las Farc, a los que les sumaron ahora más de 1.500 desmovilizados que ya estaban en la legalidad y los reincorporaron a las filas con el aval de los cabecillas que firmaron el acuerdo”.
“Para el uribismo es indispensable la existencia de la guerrilla armada así tengan que reconstruirla. Para el uribismo, la paz y la ausencia de conflicto es su liquidación. El problema es que la guerrilla insurgente no volverá. Lo que construirán son ejércitos privados del narco", acusó.
Ajustes al acuerdo
Ávila le dijo a EL NUEVO SIGLO que “en los posconflictos generalmente se espera que reincida entre un 10% y un 15% de la gente que entró al proceso de paz. Para el caso de los paramilitares reincidió un 22%. En la medida que en el caso colombiano se desmovilizaron 13.000 miembros de las Farc y hay 1.300 o 1.400, pues estamos cercanos al 11%, es decir, estamos en los estándares normales de un posconflicto. Ahorita estamos en una situación complicada, pero no es de catástrofe”.
Asimismo señaló que “estos grupos de desertores de las Farc pueden tener la intención de unirse, pero no es fácil (…) lo más que se pudiera lograr es una organización federal. No todo el mundo se va a someter a ‘Gentil Duarte’, por ejemplo”.
Y en este sentido señaló que las disidencias “tampoco están haciendo muchos operativos militares hoy día, o sea están débiles”.
No obstante, sí Ávila advirtió que “lo que tiene que ser importante es la estrategia del Estado, y sobre todo decirle al nuevo Gobierno que tenga mucho cuidado con las modificaciones que va a hacer al proceso de paz, porque eso puede terminar siendo un disparo al pie”.