Pidieron al Defensor del Pueblo ayuda para resolver un conflicto por el manejo de recursos que deja el parque Tayrona, de los que no se benefician.

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Crisis por el abastecimiento de agua, incremento en la tala de árboles, constantes quemas e inseguridad fueron algunas de las denuncias que realizó la comunidad indígena Arhuaco, del resguardo indígena de Katansama, ante la Defensoría del Pueblo. 

"Ahora hay menos nieve, nos estamos quedando sin agua y se incrementan la tala de bosques y las quemas”, denunció este sábado Margarita Villafania, líder arhuaca del resguardo ubicado en la cuenca del río Don Diego (Santa Marta), durante la reunión con el defensor del Pueblo, Carlos Alfonso Negret. 

Los líderes arhuacos de la parte baja de la Sierra Nevada de Santa Marta sienten miedo por la inseguridad que azota a su territorio, el cual sigue siendo usado como corredor del narcotráfico.

También pidieron que les ayuden a resolver un conflicto por el manejo de los recursos que dejan los turistas al parque Tayrona y de los que no se benefician como pueblo indígena.

"La Sierra es como la cabeza, la fábrica de agua, el ecosistema que alimenta al resto del territorio, pero lo tenemos en debilitamiento", agregó la líder Villafania.

"Qué buen momento para venir, mi Dios y sus dioses saben cuándo lo traen a uno para procurar sentarnos acá debajo de este árbol y hablar con tranquilidad sobre lo que ocurre en la Sierra Nevada", les dijo el Defensor Negret. Y anunció que se harán con la Defensoría del Pueblo varias mesas de trabajo sobre medio ambiente, seguridad, turismo y las víctimas del conflicto que no han sido reparadas.

"Vamos a seguir trabajando porque escuchen y tengan en cuenta a las comunidades indígenas cuando se tomen decisiones que afecten sus territorios, sus recursos y conocimiento ancestral", concluyó el Defensor Negret.