El Centro Democrático manifestó su inconformidad con lo que denomina el "mal llamado Acuerdo Nacional" propuesto por el gobierno del presidente Gustavo Petro. Según la oposición, no es que el partido no quiera dialogar, sino que las contradicciones y paradojas del Ejecutivo lo hacen inviable.
A través de un comunicado de prensa, la colectividad cuestionó fuertemente que el Gobierno proponga una cosa y salga con otra.
"Su Gobierno habla de seguridad y erradicación de la violencia en el ejercicio de la política, pero son los mayores responsables del deterioro de la inseguridad en el país al pactar con los criminales. Permanentemente, utilizan la estigmatización, el agravio personal y la infamia para atacar a los opositores", indicó Uribe.
En ese sentido, también indicaron que desde la administración actual hablan de respeto a las reglas electorales, pero "son los primeros en dejar un tufillo de un posible rompimiento institucional en el futuro próximo".
En la misiva también cuestionan que el Gobierno hable de la transformación territorial de los municipios más afectados, pero no tenga en cuenta a las 900 regiones que necesitan ayuda estatal.
Asimismo, señalaron que el Ejecutivo "hablan de crecimiento económico con equidad y transformación de la economía, pero lideran reformas que acaba".
En cuanto a las reformas sociales señalaron que "Hablan de compromiso con la deliberación argumentada y el trámite en el Congreso de las reformas sociales mientras quieren imponerlas a la fuerza utilizando mermelada o incluso adoptándolas por la puerta de atrás como sucede con la reforma a la salud que está destruyendo un sistema que no era perfecto, pero que funcionaba".
Finalmente, expresaron que el expresidente Álvaro Uribe se ha reunido con el jefe de Estado, pero no han sido productivas porque no se tiene en cuenta sus preocupaciones.
"Nuestro partido, en cabeza de su Presidente Fundador, Álvaro Uribe, se ha reunido directamente con el presidente Petro en cuatro oportunidades para exponer sus inquietudes y propuestas frente a temas neurálgicos como las reformas. Los encuentros han sido un diálogo de oídos sordos sin ningún resultado", indicó la colectividad.