Debido a varios ataques a la Fuerza Pública y la población civil en distintas regiones en los últimos días, por los que han sido señaladas las disidencias, se abre un interrogante sobre el cumplimiento del cese el fuego bilateral que estos grupos pactaron con el Gobierno. Esta situación ocurre a pocas semanas de que se inicien las conversaciones entre las partes.
En la noche del pasado jueves, una patrulla de la Policía fue atacada por sujetos armados en el municipio de Ábrego, en Norte de Santander. Como consecuencia perdió la vida el patrullero Ronald Mendoza y varios de sus compañeros resultaron heridos.
El coronel Alejandro Reyes, comandante encargado de la Policía en este departamento, dijo que "los uniformados fueron sorprendidos con disparos de largo alcance".
Horas antes, también en Norte de Santander, en el municipio de Sardinata, fue asesinado el uniformado de la Policía Jaison Jiménez, así como, en el municipio de San Calixto, el soldado profesional Jhony Alexánder Salazar Campo, quien hacía parte de la Brigada 30 del Ejército.
Los dos uniformados fueron asesinados por francotiradores. En esta región de Norte de Santander operan el Eln y las disidencias de las Farc.
El pasado jueves, en la parte rural del municipio de Cajibío, Cauca, hombres armados interceptaron al joven Fredy Guachetá, quien se movilizaba con su padre en una moto.
Los sujetos registraron a estas personas, encontrando en el celular del joven una fotografía que mostraba que estuvo en el Ejército. Aparentemente por esto le dispararon, causándole la muerte.
Las autoridades creen que el crimen pudo ser cometido por la disidencia 'Jaime Martínez', que delinque en esa región del Cauca.
Mientras que el pasado martes, en una emboscada a una patrulla del Ejército en zona rural entre Huila y Cauca, fue asesinado el soldado profesional Wílmer Vargas. Las autoridades atribuyen el ataque a las disidencias 'Dagoberto Ramos' o la 'Jaime Martínez', que delinquen en esta zona del país.
El ministro de Defensa, Iván Velásquez, señaló que “por los hechos, como se han venido presentando, particularmente de estructuras que delinquen en el occidente del país, parece que no existiera una unidad real y que estas estructuras estuvieran actuando por su cuenta, sin acatar un mando central”.
Añadió el ministro que “mientras que hay unas expresiones en las que se asume el compromiso de respeto al cese del fuego, otras estructuras, como la ‘Dagoberto Ramos’ o la ‘Jaime Martínez’, actúan en contravía y tendrá que ser el Estado Mayor Central el que defina con toda claridad o que haga que las instrucciones impartidas sean efectivas y acatadas".
El jefe de la cartera de Defensa recordó, con respecto al tema del cese bilateral, que hay unos mecanismos de veeduría, monitoreo y verificación que se deben realizar y que espera que se hagan de forma muy rápida para evaluar si hubo o no una violación al cese.
“Incidentes que en ocasiones podrían considerarse de mucha gravedad, no siempre tendrían que conducir a la terminación del mismo. En ese punto el Gobierno Nacional tendría que tomar la decisión”, señaló el ministro Velásquez.
El cese el fuego bilateral con las disidencias lo pactó el Gobierno desde el primero de enero y hasta el 30 de junio próximo. El pasado 8 de febrero el Gobierno expidió un decreto con un protocolo para el cese el fuego bilateral, donde se establecen las obligaciones de cumplimento para el Ejército y las disidencias. Esto después de las denuncias por patrullajes de este grupo en varios municipios, especialmente en Antioquia, en donde incluso se presentaron en una escuela rural armados.
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Qué dice la Defensoría
La Defensoría del Pueblo presentó un informe sobre el monitoreo al cese el fuego bilateral, entre el 21 de enero y el 17 de febrero, que el Gobierno pactó con la 'Segunda Marquetalia', el 'Clan del Golfo', 'Los Pachenca' y las disidencias.
En el caso de estas últimas, señala el informe que el 23 de enero pasado se presentó un hostigamiento contra personal del Ejército, presuntamente por integrantes del frente 'Jaime Martínez', en Buenos Aires, Cauca.
El 3 de febrero se reportó otro hostigamiento a la Estación de Policía de Corinto, Cauca, en el que no hubo heridos o fallecidos. También se atribuye a las disidencias.
El 9 de febrero se presentaron enfrentamientos armados entre el Ejército y la facción disidente 'Carlos Patiño', perteneciente al Comando Coordinador de Occidente, en Argelia, Cauca.
El 10 de febrero se registró un hostigamiento de la facción 'Dagoberto Ramos' contra efectivos del Ejército, en Corinto, Cauca.
Mientras que el 12 de febrero en Balboa, Cauca, se produjeron combates entre el Ejército y la facción 'Carlos Patiño'.