Hay varios ministerios del gobierno de Gustavo Petro que están encabezados por mujeres conocedoras de la defensa, recuperación y conservación de la naturaleza. Lo que se traduce en que Colombia le apunta a un desarrollo sostenible, garantizando el derecho de todos los ciudadanos a gozar y heredar un ambiente sano.

Para esto el gobierno de Petro y Márquez ha prometido una transformación social que lleve a Colombia a una era de paz en la que el cuidado del medio ambiente y el desarrollo sostenible es una medida transversal a todo el programa de gobierno. 

De acuerdo con el actual mandatario, la meta es convertir el país en una potencia mundial de la vida, buscando realizar transformaciones de fondo para enfrentar la emergencia por el cambio climático y la pérdida de biodiversidad.

Mujeres defensoras

Sobresalen dentro del equipo de Gobierno las siguientes mujeres que han cumplido un papel destacado dentro de la defensa del ambiente y la biodiversidad.

La vicepresidenta, Francia Márquez, quien recibió el premio Goldman. Es una reconocida líder socioambiental, que desde 1994 hasta 1997 participó en el proceso de evaluación de los impactos que generaría a su comunidad y al territorio el megaproyecto de desviación del río Ovejas a la Represa Salvajina, en particular los impactos que esta obra traería a la vida de todos los miembros de su comunidad, incluyendo el efecto negativo sobre su territorio considerado como ancestral, y por ende sobre la identidad étnica y cultural de sus habitantes.

Así mismo, en el 2005 participó en el proceso de exigibilidad a la Corporación Autónoma Regional del Valle del Cauca para la reparación de los impactos creados por el megaproyecto Salvajina.

Igualmente, Márquez fue representante del Consejo Comunitario del corregimiento de La Toma de Suárez, al norte del departamento del Cauca, donde se opuso a la explotación minera indiscriminada y a la entrega indiscriminada de títulos mineros debido al impacto negativo de estas actividades, como el deterioro del medio ambiente y el desplazamiento forzado de comunidades.

Su trabajo y luchas por el ambiente la han llevado a ser reconocida internacionalmente como defensora de derechos humanos y del medio ambiente.

Por otra parte, Cecilia López Montaño, ministra de Agricultura, es una mujer que ha investigado a fondo sobre desarrollo sostenible. Organizó el Ministerio de Ambiente,  diseñó la primera política ambiental del país y el SINA (Sistema Nacional Ambiental), hoy reconocido como de los más destacados de América Latina.

Por primera vez impulsó altas multas por contaminación y deterioro ambiental y presentó ante el Senado las primeras leyes ambientales aprobadas en el país.

De igual manera, la ministra de Ambiente, Susana Muhamad, es conocida como una persona comprometida con esta materia y las comunidades. Experta en cambio climático, transición energética, con alto compromiso social.

Desde muy joven es ambientalista e hizo un magíster en Gestión y Planeación del Desarrollo Sostenible de la Universidad de Stellenbosch.

Fue secretaria de Ambiente durante la administración Petro, y  perteneció a la Alianza Colombia Libre de Fracking; además, realizó consultas e investigaciones en temas ambientales.

Irene Vélez Torres,  ministra de Minas y Energía, cuenta con un doctorado en Geografía Ambiental. Vélez se ha desempeñado como una lideresa social ambiental en Colombia.

Desde muy joven trabajó como investigadora activista dedicada al estudio crítico y participativo de conflictos ambientales y agrarios.

Además, cuenta con amplia experiencia en temas relacionados con la contaminación por mercurio en contextos mineros, los impactos del uso de agrotóxicos, el despojo del agua y de la tierra, la soberanía alimentaria en ambientes rurales y étnicos, y la paz ambiental como dimensión imprescindible de la transición en el posacuerdo de paz.

Dentro de sus principales objetivos se encuentra acelerar la transición energética paulatina en Colombia, enfocada en el sol, el agua y el viento; para lograr una matriz mucho más sostenible, amigable con el ambiente, aliada de los territorios y que permita superar la crisis ambiental global que enfrenta el mundo.

Catalina Velasco Campuzano, ministra de Vivienda, estuvo en la Secretaría de Hábitat entre 2008 y 2009; allí lideró la formulación e implementación de políticas de gestión del territorio urbano y rural, en el marco de un enfoque de protección ambiental, con el fin de mejorar la vivienda y el urbanismo en el Distrito Capital.

• Le puede interesar: Perspectiva. Discursos presidenciales a través de la historia

El programa ambiental

Por su parte, José Antonio Ocampo es uno de los pocos ministros encargados de Hacienda, en América Latina, que ha investigado a fondo sobre desarrollo sostenible y medio ambiente.

Es de recordar que dentro de las principales propuestas de Petro en esta materia está la de crear un frente americano de lucha contra el cambio climático.

Las claves para afrontar este reto de impulsar la productividad local son la gobernanza y acceso al agua, como detalla el programa de gobierno de Petro, cuya gestión también es fundamental para su ambición de convertir a Colombia en un país líder en la lucha contra el cambio climático.

Para lograrlo, Petro propone un ordenamiento territorial alrededor del agua que impulse actividades productivas acordes con la protección de la naturaleza.

Asimismo, defender los ecosistemas marinos y las áreas insulares; recuperar costas y playas; transformar áreas en conflicto por uso del suelo en zonas forestales, agrícolas, agroecológicas y agrosilvopastoriles.

Otras de las prioridades será comprometer a Ecopetrol, la mayor empresa petrolera del país, a desempeñar un papel de liderazgo en la transición energética y hacia un modelo de economía circular.

Expertos como Manuel Rodríguez Becerra, presidente del Foro Nacional Ambiental y exministro de Ambiente, señala que “el nuevo gobierno es el más ambientalista de la historia”, y dice que hay varios integrantes expertos en la materia, empezando por el mismo Presidente.

Lo cierto es que se espera que este gobierno impulse el desarrollo de sistemas agroforestales, silvopastoriles, de aprovechamiento de productos no maderables del bosque y turismo de naturaleza, bajo el liderazgo de organizaciones comunitarias.

Por último, esta administración trabajará en sus propuestas en detener la apropiación ilegal de predios, las actividades relacionadas con el narcotráfico y la minería, con especial énfasis en zonas de frontera agraria.