Desde el Congreso de la República, el senador del partido Comunes, Julián Gallo, conocido en épocas de las Farc con el alias de ‘Carlos Antonio Lozada’, adujo este martes evidencias que, según él, demuestran que esa organización subversiva fue la autora intelectual y material del magnicidio del doctor Álvaro Gómez Hurtado, ocurrido el 2 de noviembre de 1995.

Las revelaciones de Lozada se producen dos semanas después de su segunda comparecencia ante la Jurisdicción Especial de Paz (JEP), en la que el magistrado respectivo le pidió acopiar pruebas para respaldar sus aseveraciones.

De hecho, la familia del inmolado líder conservador dejó entonces una constancia escrita, leída públicamente por su hijo Mauricio Gómez Escobar, en la que sostuvo que la autoría de la Farc podría tratarse de una autoincriminación a fin de desviar la investigación de los verdaderos responsables.

En esa dirección, Gómez Escobar sostuvo que en 1985 el ‘Secretariado’ de las Farc en pleno había invitado a Álvaro Gómez a buscar salidas para la paz y luego, cuando se produjo su secuestro en 1988, su hermana, María Mercedes, mantuvo una conversación con el comandante de esa organización subversiva, ‘Manuel Marulanda’ o ‘Tirofijo’, en la que este le dijo que, pese a considerarlo un contradictor, no lo tenían en cautiverio y nunca le harían daño.

Incluso, Gómez Escobar dijo no encontrarse satisfecho con ninguna de las respuestas dadas por Lozada al interrogatorio de su familia, en su carácter de víctima. Añadió que la carga de la prueba estaba en manos de las Farc y que debían aludir las circunstancias de tiempo, modo y lugar que fueran convincentes y no basarse en la simple auto-adjudicación hecha por Lozada como comandante del operativo de las milicias urbanas en Bogotá.

Los mensajes

Como se sabe, en las audiencias ante la JEP el hoy senador de los Comunes ha sostenido que los asesinos se movilizaron a pie ese 2 de noviembre para acabar con la vida del exdesignado a la Presidencia y no se requirió de una planeación muy exigente para perpetrar el crimen, versión que ha sembrado interrogantes.   

Entre las 11 comunicaciones cruzadas por los miembros del ‘Secretariado’, que reveló este martes Lozada, hay un mensaje que Víctor Julio Suárez, conocido como ‘Jorge Briceño’ o ‘El Mono Jojoy’, le envía el 2 de noviembre de 1995 al ‘Secretariado’, el mismo día del asesinato.

En este, ‘Jojoy’ informa: “Red urbana, le dio al ponente de las "republicas independientes" en los annos 60. la desicion es que el secretariado decida, si lo reivindicamos o no” (sic), haciendo referencia a la ‘Red Urbana Antonio Nariño’, que comandaba Lozada y habría acabado vilmente con la vida de Gómez Hurtado.

“La decisión es que el secretariado decida, si lo reivindicamos o no. qué opinan?” (sic), concluye.

La respuesta llegó al día siguiente, el 3 de noviembre de 1995, acorde con los mensajes de la época presentados por Lozada. En estos se dice: “Sobre el ajusticiamiento de Gómez Hurtado podemos hacer un intercambio de opiniones en el secretariado, para ver hasta cuándo se puede mantener en reserva o en qué momento oportuno podemos decirlo”.

En otra comunicación posterior, fechada el 2 de diciembre de 1995, ‘Marulanda Vélez’ le envió un mensaje al segundo comandante, alias ‘Alfonso Cano’, en el que le dice: “Lo de Gómez, mejor no decir nada. Se llegará el día para ello”.

Dos días después, el 4 de diciembre, ‘Tirofijo’ envía otro mensaje al resto del ‘Secretariado’ en el que reitera: “Lo del señor Gómez, debemos mantenerlo en secreto, para ver cómo vamos ayudando a profundizar las contradicciones, mientras bajamos otros”. Y allí mismo sostiene: “Los Estados mayores de bloques y comandos conjuntos no deben olvidar la creación de comandos para dar de baja a jefes políticos reaccionarios, y así ayudar a profundizar las contradicciones en el régimen político”.

Lozada ha intentado justificar el crimen de Gómez Hurtado como un corte de cuentas a raíz del debate de las llamadas “repúblicas independientes” en los años sesenta del siglo pasado y la aplicación del “Plan Lasso”.

El senador de los Comunes indicó que toda esta información fue enviada a la JEP para respaldar su versión de los hechos.

Un refrito

Por su parte, el abogado de la familia del dirigente conservador, Enrique Gómez Martínez, sobrino de Álvaro Gómez Hurtado,  desestimó el valor probatorio de estos mensajes dados a conocer por Lozada.

Dijo que se trata de mensajes apócrifos, cuya autenticidad es imposible de constatar y los calificó incluso de mentirosos.

Gómez Martínez trajo a colación que esos mensajes son un “refrito” que incluso fueron descartados por la Fiscalía General de la Nación, a raíz de ser conocidos en el llamado “Libro de Marulanda”. Este documento, cuya autenticidad tampoco ha sido corroborada, fue dado a conocer en 2012 por el dirigente uribista José Obdulio Gaviria.

El abogado de la familia Gómez Hurtado insistió en que Gallo se estaba “ahogando en sus propias mentiras”.

Al mismo tiempo, la JEP le pidió ayer a la Fiscalía que remita copia de los discos duros de los computadores decomisados a varios exjefes de las Farc, para ser tenidos en cuenta dentro del proceso por el magnicidio.

Entre esos computadores estarían los recuperados tras el bombardeo años atrás en el que fue dado de baja ‘Mono Jojoy' así como otros incautados a cabecillas de esa guerrilla. Incluso el del propio Lozada, quien dijo ante la JEP que su equipo había sido incautado por las autoridades y allí había información relevante.

Con esta solicitud, la JEP busca corroborar la información dada por Lozada, ya que como sometido a esa jurisdicción está en la obligación de confesar toda la verdad sobre los crímenes cometidos, so pena de perder los beneficios de la justicia transicional y ser expulsado de la misma.

Desmienten a Córdoba

Lozada también se refirió a las declaraciones de la exsenadora Piedad Córdoba, quien dijo haberse entrevistado semanas atrás con el único autor material del asesinato de Álvaro Gómez que sigue vivo.

Según el excabecilla guerrillero “Piedad Córdoba está haciendo un mandado, está mintiendo, y aspiro, en las próximas semanas, así como lo estamos haciendo hoy, a aportar pruebas materiales para sustentar esta afirmación”.
Lozada dijo que pronto presentará las pruebas de que ese supuesto testigo de que habla Córdoba “jamás” se entrevistó con ella.

“Seguramente va a tener que responder ante la justicia, porque uno no puede ampararse en una credencial de periodista para no revelar fuentes y tratar de enredar una investigación de una importancia y una trascendencia judicial e histórica para el país”, sostuvo el senador .

También insinuó que la excongresista estaría “buscando pista” en la JEP.