El lince boreal, especie amenazada de extinción en Francia, figura como “el pariente pobre” de los grandes depredadores en materia de preservación, según sus defensores, aunque en 2022 se lanzará un primer plan de actuación para salvarlo.
Con movimientos dúctiles y elegantes, el lince se desliza como una sombra silenciosa entre los árboles de los frondosos bosques de Jura.
Lanzado a toda velocidad hacia una gamuza, el mayor felino salvaje de Europa apenas mueve las hojas, como se ve en la película “Lince”, de Laurent Geslin, que se estrenará en Francia el 19 de enero.
Pero antes de ser protagonista de la gran pantalla, este animal de pelaje dorado con manchas negras y peludas orejas puntiagudas tuvo una existencia discreta, sin apenas atención mediática.
Tiene “un nivel de depredación de rebaños domésticos anecdótico” de 100 animales atacados al año, lejos de las 3.000 y 650 de media respectivamente del lobo y el oso, indica Nicolas Jean, director adjunto de la Oficina Francesa de la Biodiversidad (OFB).
Este cazador solitario es “menos visible”, hasta el punto que “su casi desaparición en (el macizo de) los Vosgos pasó prácticamente desapercibida”, señala Olivier Guder, coordinador de la protección del lince en la asociación Férus.
Colisiones y caza furtiva
El ministerio de Transición Ecológica anunció la elaboración del primer Plan Nacional de Acción en favor del lince, previsto entre 2022 y 2026, con el objetivo de “determinar las acciones a poner en marcha en Francia para devolver la especie a un buen estado de conservación”.
Llegado de Suiza en los años 1970, el lince boreal se instaló en el macizo del Jura, que acoge dos tercios de los 150 ejemplares presentes actualmente en Francia. Los otros están en los Alpes y, de manera esporádica, en el macizo de Vosgos donde reapareció tras una reintroducción reciente en la cercana región alemana de Palatinado.
El plan busca “reducir la mortalidad ligada a colisiones” y a “luchar contra las destrucciones ilegales de linces” que son las principales amenazas directas sobre esta especie clasificada “en peligro” en la “lista roja” francesa de especies amenazadas de extinción de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza.
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En 2021, doce ejemplares, “un 10% de la población fue arrollada por un vehículo”, lamenta el Centre Athénas, especializado en la protección de este animal.
“La especie humana avanza cada vez más en la naturaleza, hay cada vez más vehículos, con un flujo importante de trabajadores fronterizos”, analiza su director Gilles Moyne, que aboga por la “creación de zonas refugios”.
Este ferviente defensor del felino critica que “no se han puesto los medios necesarios para luchar contra la caza furtiva” y que se ha sido “complaciente” con quienes cargan fusiles en la naturaleza.
Según los servicios estatales, se han contabilizado una veintena de “destrucciones ilegales” de linces desde el regreso de la especie a Francia, “lo que representa un 10% de los individuos hallados muertos”, una cifra que se considera “subestimada”.
En 2020 la justicia abrió investigaciones por “destrucción de especie protegida” tras el deceso de cuatro linces por armas de fuego.
Interés para la biodiversidad
El plan lince prevé “acciones sociológicas para restaurar la imagen del lince en cazadores, algunos de los cuales lo consideran como un competidor, para mostrar su interés para la biodiversidad y restablecer la verdad sobre su impacto en las poblaciones de ciervos”, indicó Jean, de la OFB.
Para el presidente de la federación de cazadores de Jura, Christian Lagalice, “el lince formará parte de nuestro ambiente, es un animal protegido y nosotros respetamos este estatus”.
Espera que el plan nacional aporte “un mejor conocimiento” de la especie y que “lleve el lince a lo que es, sin sacralizarlo: un animal muy bello que forma parte de nuestro ambiente, como cientos de otros”.
Para asegurar la diversidad genética y la continuación de la especie, Férus y el Centre Athénas reclaman reintroducciones del lince, pero cazadores y ganadores se oponen prefiriendo que el animal “se expanda naturalmente”.