En el primer trimestre del año ingresaron al país US$2.046 millones por concepto de remesas, una cifra importante para la economía nacional, teniendo en cuenta que, de seguir con ese comportamiento, se podría llegar a final de año con un dígito similar o mayor al del 2021, con US$8.597 millones.

Además, de acuerdo con el último informe del Banco de la República, en abril el rubro de remesas ascendió a US$754 millones, siendo el de mejor comportamiento en lo que va del año (hasta abril), y que junto a los tres primeros meses de 2022 suma un aproximado de US$2.800 millones.

En este sentido, en el último año, de acuerdo con el Emisor, las remesas representaron el 2,7% del PIB en dólares y el 12,6% de los ingresos externos corrientes. Además, en 2021 el flujo de remesas recibidas por los hogares colombianos alcanzó un nivel de US$8.597 millones, lo que significó un aumento anual de 24,4% que no se registraba desde el primer cuatrienio de la década del 2000, cuando su crecimiento promedio anual fue de 24%.

De acuerdo con lo anterior se podría asegurar que la importancia de las remesas no solo es significativa para las familias, sino para la economía de los países receptores. En ese sentido, José Ignacio López, director de Investigaciones Económicas de Corficolombiana, le dijo a EL NUEVO SIGLO que “creemos que este año va a ser importante para el país en materia de remesas, ya que las cifras con las que terminaría el 2022 podrían ser muy similares a las del año pasado, lo que significa que estaríamos cerrando en un rango de US$8.600 a US$8.800 millones”.

Ingresos

“Las remesas han tenido un crecimiento importante, sobre todo desde la pandemia, en primer lugar, originadas por un paquete fiscal en Estados Unidos que generó algunos ingresos adicionales que afectaron positivamente el flujo. Además, durante este año se ha visto un incremento salarial en ese país que también repercute en el envío de dinero. Sin embargo, se empezó a evidenciar una desaceleración en Europa y probablemente los influjos de dinero que vienen de España, por ejemplo, van a tener un menor dinamismo sobre todo en el segundo semestre”, añadió López.

Por otra parte, el analista le dijo a este medio que “la importancia de las remesas se debe a que se han vuelto una fuente muy importante de divisas, en particular porque en algunas regiones del país apalancan el consumo de las familias y por tanto es uno de los motores de la recuperación de la economía colombiana”.

El ingreso de las remesas no solo en Colombia sino en todos los países receptores ha sido de gran importancia para el consumo y la economía, justamente ayer (16 de junio) se celebró el Día Internacional de las Remesas Familiares, que reconoce la contribución fundamental de los trabajadores migrantes y sus familias, al desarrollo económico y social de sus comunidades y países de origen.

En el marco de esta celebración Gilbert Houngbo, presidente del Fondo Internacional de Desarrollo Agrícola (FIDA), afirmó que “los flujos de remesas (US$605.000 millones) triplican el monto total de la ayuda oficial al desarrollo internacional (US$178.600 millones). Este año se calcula que el dinero enviado por más de 200 millones de trabajadores migrantes de todo el mundo a sus hogares alcance los US$630.000 millones, lo que supondrá un salvavidas para más de 800 millones de familiares”.

“Las remesas sacan a las personas de la pobreza, ponen comida en la mesa, pagan la educación y los gastos médicos y permiten invertir en las viviendas, así como alcanzar muchos otros objetivos familiares que van más allá del consumo”, añadió Houngbo.

Según el informe MobileRemit África, publicado por el FIDA, en 2021 las remesas mundiales aumentaron un 8,6%, a pesar de las predicciones que apuntaban a una disminución de los flujos de remesas a causa de la pandemia de covid-19, el impulso favorable se mantuvo gracias a un aumento del 48% en el dinero enviado a través de medios de telefonía móvil.