Falta menos de un mes para el inicio del Mundial de Fútbol Catar 2022 y Lusail, la ciudad que fue construida especialmente para el evento, ya está lista. El lugar tiene 35 kilómetros a la redonda y cuenta con dos puertos deportivos, zonas residenciales, centros comerciales, tiendas de lujo, playas y hasta dos campos de golf.
Con capacidad para 80 mil personas, el estadio Icónico de Lusail tuvo un costo de 2.105 millones de dólares. Su edificación comenzó en el 2005; antes de esa fecha solo se encontraban chozas y arena. Era prácticamente una zona más en medio del desierto, sin ningún atractivo turístico.
Pero luego de un enorme desembolso de dinero se pudo desarrollar gran parte de la ciudad que tendrá los ojos del mundo encima, cuando se juegue la final del Mundial de Catar 2022, el 18 de diciembre, en el estadio Icónico de Lusail.
En este sentido, la ciudad se desarrolló como una metrópoli de vanguardia para más de 200 mil habitantes. La planificación puso el foco en la creación de espacios verdes y construcciones sustentables que protejan el ambiente, con la intención de escribir el futuro de Catar homenajeando el rico pasado del país y la región.
Otra de las atracciones con las que cuenta Lusail son las Katara Towers, un proyecto hotelero que incluye torres de 38 pisos y mide 211 metros.
También tendrá una isla artificial con un conjunto de ocio, deportes náuticos y hasta parques acuáticos.
- Le puede interesar: “Cumbiana Tour” de Carlos Vives, hoy en el Movistar Arena
MotoGP
Cabe destacar que, desde 2004, la ciudad de Lusail es la sede del Gran Premio de Catar de MotoGP, la competencia de motociclismo más importante del mundo. Con una longitud de 5.783 metros y 16 curvas a lo largo del trazado, los mayores ganadores el Gran Premio son Casey Stoner y el histórico Valentino Rossi, con cuatro victorias cada uno.
El epicentro de la nueva ciudad, cuya superficie incluye una zona de islas, es efectivamente el “Estadio Icónico de Lusail”, donde se disputarán 10 partidos del Mundial, entre ellos la final. Tiene capacidad para 86.250 espectadores.
A 40 kilómetros de Lusail, en el barrio casi desértico de Barwa Barahat Al-Janoub, otro ejército de trabajadores cumple su jornada laboral bajo iluminación artificial de noche o bajo un fuerte sol de día.
En este nuevo barrio se han construido pequeños apartamentos para los hinchas menos adinerados, que en cualquier caso tendrán que pagar unos 90 dólares por una noche en una cama de acero en un dormitorio compartido, situado a 10 kilómetros de la estación de metro más cercana.
El Lusail Stadium
Es el más grande de Catar y el elegido para albergar la final de la próxima Copa del Mundo, se inauguró el pasado mes de septiembre con la disputa de un duelo entre el campeón de la Pro Liga saudí y el de la Premier League egipcia.
El recinto, situado a 15 kilómetros del centro de Doha, albergará partidos durante todas las fases del Mundial, empezando por el choque del Grupo C entre Argentina y Arabia Saudí el 22 de noviembre.
Esta nueva ciudad está rodeada por una piscina reflectiva. Los espectadores solo podrán ingresar al estadio mediante seis puentes. Su fachada reproduce una decoración intrincada y otras piezas de arte del surgimiento de la civilización, encontradas a lo largo del mundo islámico. El techo, con forma de silla de montar, puede abrirse o cerrarse por completo. El perfil cóncavo del estadio evoca, también, las velas de los tradicionales barcos dhow.
Según indicaron desde la organización del Mundial, el diseño del estadio "se inspira en el juego de luces y sombras que caracteriza a la linterna fanar" y tanto su forma como su fachada toman como ejemplo "motivos decorativos de cuencos, vasijas y otras piezas de arte que se encuentran en el mundo árabe e islámico durante el auge de la civilización en la región".
Contra el viento
Entre las innovaciones del estadio, cuenta con un material de última generación, llamado “Ptfe” (conocido químicamente como politetrafluoroetileno y coloquialmente como teflón), que le protege del viento cálido, impide la entrada de polvo y permite que crezca la luz suficiente para el campo, al tiempo que proporciona sombra para reducir la carga del aire acondicionado.
“La presentación del estadio de Lusail es el último hito de nuestro viaje antes del gran comienzo del 21 de noviembre. Este increíble recinto constituye nuestra pieza central y será el centro de atención cuando acoja la final de la Copa del Mundo el 18 de diciembre, que es también el Día Nacional de Catar. Me siento orgulloso de que esta sede desempeñe un papel importante durante el torneo y de que deje un legado duradero para los habitantes de Lusail y la comunidad en general", señaló Hassan Al Thawadi, secretario general del Comité Supremo para la Entrega y el Legado de Qatar 2022.
Por su parte, el ingeniero Yasir Al Jamal, director general de este comité, recalcó que el recinto "es una increíble obra de ingeniería y del que todo el país y la región pueden estar orgullosos. Me gustaría rendir homenaje a todos los que han trabajado tan duro para entregar este estadio y prepararlo para el mayor espectáculo del mundo", subrayó.
Asimismo, Nasser Al Khater, director general de Qatar 2022, cree que el estadio será "un magnífico escenario para la final" del torneo y que supone "la última pieza del rompecabezas", mientras tiene claro que acoger el 9 de septiembre la denominada Supercopa de Lusial les dio "una gran oportunidad de poner a prueba la preparación del recinto y los numerosos planes operativos que hemos puesto en marcha".
Cuando el Mundial culmine, el estadio será incorporado a las necesidades cotidianas de la nueva ciudad como un gran centro comunitario. La capacidad será reducida a 20 mil y en el espacio restante se desarrollarán escuelas, comercios, cafés, instalaciones deportivas y clínicas de salud, entre otros proyectos. Los asientos removidos serán donados, aseguran, para impulsar proyectos deportivos en todo el planeta.