Como dice el viejo adagio "Muchos son los llamados, pero poco son los escogidos". Entre más de treinta inscritos para la cerrera presidencial, con las fórmulas de ley, sólo una tercera parte tiene méritos y una novena parte cuenta con votos. Creemos que de arranque Oscar Iván Zuluaga es el mejor posicionado ya que podrá contar con el apoyo del expresidente Uribe. Mucho más tecnócrata que político, Alejandro Gaviria tiene las ganas y los conocimientos para aspirar y podía dar una buena pelea a Zuluaga. Un tercero en discordia sería Enrique Peñalosa, estupendo administrador pero pésimo político. Juan Carlos Echeverry es otro con garra y experiencia. Por la oposición y en solitario, pero con ocho millones de electores, está Gustavo Petro, que desde ya está infundiendo y será un hueso duro de roer.
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El presidente Iván Duque, por austeridad, ha suprimido tres consejerías presidenciales de las quince actualmente existentes. ¡Debería haberlas suprimido todas! Nuestra burocracia es rampante y sobran ministerios. Igualmente, importante es la congelación de las nóminas oficiales en todos los sectores y niveles, no por cinco sino mínimo por diez años. Un estudio serio que se hizo hace unos años arrojaba la conclusión que con la mitad de los empleados oficiales el Estado marcharía mucho mejor. La duplicidad de funciones es un lugar común y esto se pone de presente cuando se cita a reuniones y asisten una gran cantidad de funcionarios que hacen lo mismo. Y algo que es realmente urgente es regular y reglamentar los viáticos que en muchos casos son realmente escandalosos.
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Su cumple un nuevo aniversario, el vigésimo, del pavoroso atentado contra las Torres Gemelas en Nueva York y que llenó de incertidumbre a los estadounidenses. Y estos actos terroristas siguen cometiéndose en muchos países. Han llegado incluso al poder como en los casos de Afganistán, Siria e Irán. En Colombia y Latinoamérica también hemos padecido este flagelo. Desgraciadamente contra estas amenazas es bien poco lo que se puede hacer, al menos que haya colaboración eficaz de la comunidad. El más peligroso de los terrorismos es el que ejecutan los extremistas y fundamentalistas por motivos religiosos. En nombre de Alá, el Misericordioso, son muchas las atrocidades que a diario se cometen.
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Cómo nos hace sufrir nuestra querida Selección colombiana de fútbol. Mucho toque-toque, pero de gol muy poco. Estamos en un quinto lugar, al borde del abismo. Aunque le ganamos a Chile, con un buen juego, no tenemos asegurado el tiquete a Catar. Es increíble que con tanta figura individual de marca mundial tengamos un equipo tan vulnerable. Esta es la hora que tampoco sabemos si el profe Rueda es el entrenador que necesita esa selección. Después de tantos años, de tanto sufrimiento, seguimos encomendándonos al Altísimo cuando salimos a la cancha. Es más que evidente que el riesgo está en nuestro ADN y en nuestra "idiosincrasia".